Alianza entre empresas para reutilizar residuos con fines energéticos
El complejo San Luis Potosí de General Motors firmó un acuerdo con CEMEX para que los residuos no reciclables de la planta puedan ser usados durante la elaboración del cemento, evitando el consumo de recursos naturales no renovables y generando energía. CEMEX proporcionará energía eléctrica para la operación del Complejo.
General Motors Complejo San Luis Potosí cuenta con un Sistema de Administración de Residuos que destinará los residuos que no pueden ser reciclados a CEMEX para ser utilizados, mediante el sistema de co-procesamiento, en los hornos de este socio de negocio para la elaboración de cemento. Adicionalmente a este proceso, CEMEX en sociedad con General Motors de México, proporciona energía eléctrica para la operación del Complejo por medio de su planta generadora de energía Termoeléctrica del Golfo.
“En General Motors de México estamos comprometidos con el medio ambiente y el Complejo San Luis Potosí realiza muchas iniciativas para reforzar este compromiso, contribuyendo no solamente a lograr los resultados de GM, sino al mismo tiempo, a disminuir el impacto ambiental en nuestra comunidad”, comentó Gustavo Céspedes, Director de GM Complejo San Luis Potosí. “Este acuerdo con CEMEX nos ayuda a colaborar con un mismo fin, que es lograr la máxima eficiencia en el manejo de recursos para su máximo aprovechamiento y contribuir a la conservación de nuestro entorno”.
El Complejo San Luis Potosí obtuvo la certificación de planta Zero Landfill (Cero desechos) en diciembre de 2009 por parte de la Corporación de GM, lo que significa que el Complejo no destina ninguno de sus residuos a rellenos sanitarios o confinamiento.
El co-procesamiento es una alternativa sostenible y económicamente viable para el tratamiento y la valorización de los residuos, que permite cumplir los estrictos parámetros de operación y monitoreo que se realizan durante el proceso de elaboración del cemento.
Desde hace más de 40 años, los hornos cementeros de CEMEX -que alcanzan temperaturas de hasta 2,000 grados centígrados-, operan con un avanzado sistema de control y cuentan con un potente sistema de filtrado y neutralizado de gases, lo que les permite aprovechar los residuos sólidos que ya no tienen posibilidad de reciclarse directamente. Además, permite la sustitución de combustibles fósiles y reduce la emisión de CO2, siendo una opción ambientalmente favorable, ya que se evita la disposición de residuos en rellenos sanitarios y confinamientos, y contribuye a prolongar su vida útil. Adicionalmente, disminuye el uso de recursos no renovables en hornos de cemento, al tiempo que promueve la filosofía de Zero Landfill. Es un proceso probado, comúnmente utilizado en varios países de Europa, Estados Unidos y Canadá.