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Condiciones de trabajo y biocombustibles

22.08.2011 | América Latina

Está prevista para la primera quincena de mayo la realización de una audiencia en la Cámara Federal de Justicia para discutir las condiciones ambientales de trabajo en la cadena productiva del biocombustible, especialmente en la recolección de caña de azúcar. La medida fue aprobada por la Comisión de Trabajo, Administración y Servicio Público del Congreso.

 

"La cadena productiva de caña de azúcar es históricamente degradante. Existe un modelo y no queremos que el mismo sea reproducido en los cultivos de palmera y mamona, por ejemplo", dijo a AmbienteBrasil el diputado Eduardo Valverde (PT-RO), autor del requerimiento que propone la audiencia.
Para el evento, están siendo invitados el ministro de Trabajo y Empleo, Carlos Luppi; la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, y presidentes de centrales sindicales.
Según el diputado, varios países han demostrado gran interés por el Programa Pro-Etanol, entre ellos Estados Unidos, que pretende invertir cerca de 200.000 millones de dólares (unos R$ 406.000 millones) hasta el 2020, además de Italia, que invertirá 480 millones de dólares (cerca de R$ 975 millones).
"El biocombustible es una ventana para nuevas oportunidades. Las precarias condiciones de trabajo de esos trabajadores y la devastación de las florestas para la producción pueden ser usadas como barreras comerciales, pues los países industrializados pregonan el libre comercio, pero practican el proteccionismo", alerta.
Valverde explica además que la audiencia va a tratar de otros modelos productivos, que no se basen en el trabajo asalariado, como por ejemplo, cooperativas y la agricultura familiar. "Si el biocombustible pasa a ser la matriz energética principal del país, entonces nuevos marcos regulatorios tienen que ser creados", defiende.
La Comisión de Trabajo, Administración y Servicio Público de la Cámara también aprobó requerimiento para la realización de audiencia pública, con el objetivo de escuchar a los principales dueños de ingenios del país sobre denuncias recientes acerca del uso de mano de obra esclava en haciendas de caña de azúcar.
Según la Organización Internacional del Trabajo - OIT -, el 3% de las 170 empresas que constan en la lista del trabajo esclavo en Brasil son ingenios de etanol o haciendas de cultivo de caña de azúcar.
El autor del pedido de la audiencia, todavía sin fecha agendada, fue el diputado Paulinho da Força (PDT-SP).
(Adital / Traducción: Daniel Barrantes)

"La cadena productiva de caña de azúcar es históricamente degradante. Existe un modelo y no queremos que el mismo sea reproducido en los cultivos de palmera y mamona, por ejemplo", dijo a AmbienteBrasil el diputado Eduardo Valverde (PT-RO), autor del requerimiento que propone la audiencia.
Para el evento, están siendo invitados el ministro de Trabajo y Empleo, Carlos Luppi; la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, y presidentes de centrales sindicales.

Según el diputado, varios países han demostrado gran interés por el Programa Pro-Etanol, entre ellos Estados Unidos, que pretende invertir cerca de 200.000 millones de dólares (unos R$ 406.000 millones) hasta el 2020, además de Italia, que invertirá 480 millones de dólares (cerca de R$ 975 millones).
"El biocombustible es una ventana para nuevas oportunidades. Las precarias condiciones de trabajo de esos trabajadores y la devastación de las florestas para la producción pueden ser usadas como barreras comerciales, pues los países industrializados pregonan el libre comercio, pero practican el proteccionismo", alerta.
Valverde explica además que la audiencia va a tratar de otros modelos productivos, que no se basen en el trabajo asalariado, como por ejemplo, cooperativas y la agricultura familiar. "Si el biocombustible pasa a ser la matriz energética principal del país, entonces nuevos marcos regulatorios tienen que ser creados", defiende.

La Comisión de Trabajo, Administración y Servicio Público de la Cámara también aprobó requerimiento para la realización de audiencia pública, con el objetivo de escuchar a los principales dueños de ingenios del país sobre denuncias recientes acerca del uso de mano de obra esclava en haciendas de caña de azúcar.
Según la Organización Internacional del Trabajo - OIT -, el 3% de las 170 empresas que constan en la lista del trabajo esclavo en Brasil son ingenios de etanol o haciendas de cultivo de caña de azúcar.
El autor del pedido de la audiencia, todavía sin fecha agendada, fue el diputado Paulinho da Força (PDT-SP).
(Adital / Traducción: Daniel Barrantes)