Durante el encuentro, la economista Viviana Fridman, quien se desempeñó como consultora internacional para el BID y el Banco Mundial en la Argentina y el Uruguay, sostuvo que las organizaciones pueden acceder a diversas formas de financiamiento internacional, a través de fundaciones internacionales, cooperaciones bilaterales u organismos multilaterales.
“Los fondos disponibles hay que buscarlos en las páginas web. Todos están allí. Hay que ver sus requerimientos, los temas que les interesa y tomar contacto”, aseguró. Fridman aportó un dato poco conocido: El Fondo Monetario Internacional (FMI) también dispone de una pequeña línea de créditos para organizaciones sociales.
Para María Faré García, polítóloga, máster en cooperación internacional, el financiamiento de las comunidades autónomas españolas es uno de los menos considerados por las organizaciones locales a la hora de salir a buscar recursos. 
“La Argentina no está entre los países que más ayuda reciben del exterior pero entre los que más aportan para el país, España es prioritario”, indicó Faré García y agregó que desde 2001 esa ayuda tiende a incrementarse. En ese sentido, aconsejó presentar proyectos para recibir fondos de Galicia, Valencia, Islas Baleares, La Rioja y Murcia, comunidades cuyas convocatorias abren durante el primer semestre del año. 
A su turno, la contadora Isabel Friz advirtió que este año, como consecuencia de nuevas normas de la AFIP, “20 mil organizaciones perdieron la exención impositiva y fueron borradas del padrón”. Por lo que aconsejó verificar la situación de cada entidad porque “si no estamos en la página de la AFIP, no pertenecemos a nada”, ironizó.
Oscar García, representante latinoamericano en la Junta Directiva Mundial de la Asociación Internacional de Esfuerzos Voluntarios (IAVE), definió el papel de los voluntarios en las OSC y cuestionó el hecho de que muchas organizaciones busquen un profesional voluntario, porque advirtió: “se está produciendo un cuello de botella entre las personas que tienen ganas de hacer algo con una demanda excesivamente cualitativa de voluntarios”. Para García incorporar como voluntarios a los propios beneficiarios “enriquece la tarea”. 
El asesor en procesos de desarrollo institucional y miembro de la Asociación Poleas, Félix Bombarolo, fue quien dio cierre a la actividad. Tras destacar la heterogeniedad del sector social, Bombarolo subrayó la necesidad de poner el acento en los saberes gestados dentro de las mismas OSC, más allá del asesoramiento técnico profesional.
Desde su puesta en marcha, Risolidaria publicó información vinculada a más de 4 mil organizaciones sociales e instituciones privadas o públicas, alrededor de 10 mil documentos con contenido periodístico e informativo, unas 2 mil notas periodísticas sobre temas de Voluntariado, Educación, Salud, Sociedad y Tercer Sector y casi 50 Informes Especiales.
También se difundió información referida a 180 microemprendimientos productivos en la sección De Compras, 80 boletines informativos de distribución gratuita, más de 1100 Campañas y otras 2300 actividades en la Agenda.
Carmen Grillo, directora de la Fundación Telefónica resaltó que a través de Risolidaria, la Fundación se propuso que “las nuevas tecnologías contribuyan a mejorar la difusión de las ONG y favorecer su visibilidad”.