Entre los principios que rigen la filosofía del BICEP se incluye el estimular las energías renovables; promocionar la eficiencia energética; y fomentar la creación de green jobs. “Estas empresas tienen un mensaje claro para el Congreso para el año que viene: hay que moverse rápido en contra del cambio climático y empezar una transición hacia una próspera economía de energías limpias a través de los green jobs”, afirmaba la presidenta de Ceres, Mindy Lubber.

“El cambio climático es una amenaza para cualquier negocio que se relacione con la agricultura, como es el caso del café”, afirmaba el vicepresidente de Starbucks, Ben Packard, quien añadía que “Starbucks cree que tratando el cambio climático se podrá ayudar ayudar empresas como la nuestra a reducir el coste de nuestras operaciones y mitigar la futura inestabilidad económica que vendrá con cambios en las condiciones climáticas y las pérdidas agrícolas”.

Por su parte, la vicepresidenta de Levi Strauss señalaba que “un cambio climático a gran escapa podría tener consecuencias económicas, sociales y ambientales en nuestros negocios y en las comunidades en las que operamos” y, por ello, manifestaba que a pesar de que están desarrollando compromisos voluntarios para luchar contra el fenómeno, “creemos también que esencial el liderazgo del gobierno de los Estados Unidos si queremos crear un contexto en el que todas las empresas de EE.UU. reconozcan el papel que debemos de jugar en nuestra lucha contra el cambio climático y las responsabilidades asociadas a ello”.