Uno de los casos de éxito recogidos por la publicación es la participación del Ayuntamiento de Barcelona, la Diputación de Barcelona y la Generalitat de Catalunya en un grupo de trabajo, impulsado por SETEM, de Compra Pública Socialmente Responsable que se reúne mensualmente desde junio de 2012.

El objetivo del estudio es impulsar la introducción de criterios sociales en las licitaciones que se prevén de productos textiles y material informático de las tres administraciones, que son las principales compradoras del sector público en Cataluña.

Una de las primeras tareas del grupo de trabajo fue analizar las convocatorias de licitación que estaban previstas para asegurarse de que el cumplimiento de los convenios fundamentales de la Organización Internacional del Trabajo era uno de los requisitos.

El informe también analiza doce licitaciones de toda Europa que han incluido la responsabilidad social gracias al trabajo del proyecto Landmark y analiza las lecciones aprendidas para que otras administraciones puedan hacer uso de ellas.

La iniciativa Landmark (literalmente en inglés, 'hito') quiere convertir las autoridades locales europeas en agentes clave en el fomento de condiciones de trabajo justas con respecto a ciertos productos adquiridos por el sector público europeo.

En el proyecto participan SETEM, ICLEI - Governments for Sustainability, Weed (Alemania), El Senado de Finanzas de la Ciudad Libre Hanseática de Bremen (Alemania), Instituto Marques de Valle Flor (Portugal) y el Ayuntamiento de Loures (Portugal), con la financiación de la Unión Europea.