Inversión para el ahorro energético
Repsol YPF invierte más de 4 millones de dólares en su Refinería de Luján de Cuyo, en la provincia argentina de Mendoza, en un nuevo sistema de recuperación de calor en los hornos de las unidades de Topping IV y Vacío, que implica un mayor ahorro y eficiencia en la utilización de la energía, y un mayor cuidado del medio ambiente.
Esta obra, que está alineada con las iniciativas de ahorro energético que impulsa Repsol YPF, permite un ahorro equivalente a 62.000 m3 de gas natural /día, similar al consumo de 9.300 casas (consumo promedio 75-100 m2).
El proyecto consiste en la ampliación de la zona convectiva del horno de calentamiento de crudo logrando una eficiencia energética superior al 80%; en la instalación de quemadores de última generación que mejoran la combustión; en la generación de vapor con los gases calientes de la chimenea del horno, que antes se eliminaban a alta temperatura a la atmósfera; y en la instalación de un sistema de control operativo automático e inteligente, aportando la seguridad requerida en una operación de este tipo.
La unidad Crudo y Vació está constituida por una unidad de destilación primaria de crudo y otra de destilación al vacío que procesa los residuos pesados de la primera. La destilación es un proceso físico, que en base a diferencia de volatilidades y temperaturas de ebullición de los componentes, logra la separación de diferentes cortes del petróleo crudo, sin rotura molecular.
La Refinería de Luján de Cuyo, inaugurada el 20 de diciembre de 1940, es una de las plantas más importantes en su tipo en América del Sur. La misma tiene una capacidad de procesamiento de 6,4 millones de m3 de petróleo por año, lo que representa una participación del 18% en el mercado de refinación total de Argentina.
En Luján de Cuyo se elaboran prácticamente todos los productos combustibles que Repsol YPF comercializa en el país: gasoil, gasoil minero, gasoil agro, JP1, kerosene, nafta súper, nafta virgen, propano y butano entre otros.