Guiados por uno de los valores fundacionales de la corporación, Kimberly-Clark Argentina emprendió su programa de relaciones con la comunidad, destinado a cubrir las necesidades de instituciones y ONG’s ubicadas en las comunidades donde la compañía tiene sus plantas: Bernal, Pilar y San Luis.

El foco de este programa está puesto principalmente en los más chicos. Esta necesidad de actuar se encuadra perfectamente con el mandato de la corporación “preocupación por los demás”, uno de los cuatro valores fundacionales de Kimberly-Clark. “Desde la dirección se planteo analizar la posibilidad de ver en qué medida podíamos interactuar en las comunidades en las cuales estamos operando, para generar un proceso que pueda ayudar a mejorar las condiciones de vida de la zona”, resumió Fernando Hofmann, Director de Asuntos Legales y Corporativos de la compañía. 

Así surgió el programa de Kimberly-Clark Argentina “confirmando así que nuestra compañía comprende las carencias que afectan al país. Por eso desarrollamos un plan de ayuda a la comunidad que prevé la atención de las necesidades de áreas tales como salud/alimentación, educación y cultura”, agregó Hofmann.

Diseñado para cubrir integralmente las necesidades de los chicos, el programa está e structurado sobre tres pilares o bases: salud-alimentación, educación y cultura.

Salud-Alimentación

El área de salud alimentación es la primera y más urgente de trabajar. Apunta a cubrir la necesidad alimentaria de los dos comedores de las localidades de Pilar y Avellaneda que la compañía apadrina. Allí, más de 300 chicos reciben las tres comidas diarias y la contención a través del fomento en el hábito de la lectura a través de acciones diseñadas específicamente en conjunto con la Fundación Leer.

“La tarea de selección de los comedores fue un trabajo complejo y evaluamos varios lugares considerando que el foco del proyecto estaba en la infancia”, dijo Hofmann.

Educación

Kimberly-Clark Argentina coordinó junto a la Fundación Leer un convenio para fomentar la lectura y estimular las capacidades de los niños. Por medio de este acuerdo, se desarrollaran programas que tienen como fin incentivar la lecto-escritura, capacitar a maestros y personas adultas, entregar material y fomentar la adquisición de herramientas para que más de 500 chicos puedan insertarse y desarrollarse en la sociedad.

Con la realización de una jornada de capacitación destinada a los coordinadores y docentes de la Escuela N° 51 y a los responsables del Área de Pediatría del Hospital Materno Infantil, se puso en marcha el programa bajo el nombre Leer es Fundamental Argentina en la Ciudad de San Luis, (Fundación Leer y Kimberly-Clark).

El objetivo es que los coordinadores y docentes generen y afiancen el vínculo de los niños con los libros, para que de este modo, se motive a los pequeños al hábito de la lectura, tan importante para formar nuestros jóvenes del futuro.

En este marco, los niños del Hospital Materno Infantil de San Luis podrán gozar de un Rincón de Lectura, un espacio confortable para que junto con sus padres, vivan la magia de disfrutar y compartir 250 libros con nuevas historias. 

El objetivo de esta acción, se centra en la lectura como alternativa estimulante para aliviar la convalecencia de los niños, fortalecer el buen ánimo, a la vez que se los estimula en la lectura por placer de la mano de maravillosas historias que alimentarán su imaginación.

A lo largo del 2003, se implementarán tres jornadas de trabajo en la Escuela N° 51 de la provincia de San Luis relacionadas con la lectura que se llamarán: “Jornadas Festivas de la Lectura", celebraciones que – como en un juego – introducirán a los niños al mágico universo de los libros. Al finalizar las tres reuniones, se habrán distribuido de manera gratuita 310 ejemplares de cuentos nuevos, que los niños convocados podrán conservar en propiedad, para ellos y sus familias.

Cultura

El programa de relaciones con la comunidad de Kimberly-Clark Argentina incluye en esta área también un convenio con el Museo de Arte Latinoamericano (MALBA), y las compañías Mattel, Mimo y Nestlé, para acercar a los más pequeños al museo y al mundo del arte. “Creemos que por medio de estos programas se generan espacios de discusión, reflexión y la posibilidad de conocer, describir, aceptar y reconocer los pensamientos e ideas de cada uno de los chicos”, comentó Fernando Hofmann.

Esta iniciativa tiene proyectado involucrar a 30.000 chicos en edad escolar, a razón de 120 por día, quienes tendrán acceso a las colecciones del museo y podrán participar de talleres de arte interactivos.

La actividad central, consiste en la organización de visitas participativas para chicos en edad escolar a las salas de exhibición del Museo. Estos recorridos estarán a cargo de recreadores y tienen como objetivo brindarle a los niños elementos para que puedan desarrollar una mirada estética y crítica que los ayude a expresarse y enriquecerse culturalmente, mejorando así su calidad de vida.

Luego de un recorrido de 45 minutos por las salas de exhibición, los chicos pasan a un taller donde realizan obras conjuntas utilizando materiales descartables (cartones, telas, envases plásticos, corchos y alambres) y otros con pintura. 

Estas acciones no finalizan en el Museo, ya que a las maestras que participan se les entrega una guía didáctica. “Queremos que los chicos continúen con estas actividades y desarrollen su máximo potencial”, declaró Hofmann.

Compromiso con la sociedad

Para sostener el programa de relaciones con la comunidad, Kimberly-Clark Argentina hizo una gran inversión en recursos humanos y económicos. Hofmann aseguró que “Creemos que lo importante, más allá de la inversión realizada en el programa es el valor de la iniciativa”. Si bien el programa “es muy joven”, ya que se lanzó hace apenas unos meses, los resultados ya empiezan a sentirse. “Los destinatarios se emocionan ante esta posibilidad activa en los distintos ámbitos y por otro lado los empleados, tienen ahora un lugar donde canalizar sus inquietudes de ayudar y colaborar con la sociedad, mejorando el clima laboral, y el sentido de pertenencia”, explicó Hofmann.

Hospital General de Niños Pedro de Elizalde

El Hospital General de Niños Pedro de Elizalde ex Casa Cuna ha nombrado padrino de la institución a Kimberly-Clark Argentina como reconocimiento de todas las actividades que la empresa desarrolló y continúa desarrollando para mejorar la calidad de vida de los niños que allí son hospitalizados.

Kimberly-Clark Argentina donará 35.000 pañales mensuales, cubriendo así las necesidades que posea el hospital durante todo el año. Asimismo, los niños podrán gozar de un Rincón de Lectura, un espacio confortable para que junto con sus padres, vivan la magia de disfrutar y compartir libros.

“Nos sentimos realmente orgullosos de ser los padrinos del Hospital de Niños Pedro de Elizalde”, declaró Hofmann.