De hecho, España es un país pionero en la publicación de estos documentos. Según Ernst Ligteringen, director ejecutivo de Global Reporting Initiative (GRI), el principal estándar internacional para la elaboración de informes de RSC, en España se elabora el 25% de las memorias de este tipo en Europa.

A pesar de la fuerte tendencia a publicar memorias de RSC, hay algunos sectores más activos que otros. Por ejemplo, la banca o la construcción son líderes en relación a la divulgación de información relacionada con los progresos realizados en materia ambiental, social y de comportamiento ético. Mientras, otros sectores como el agua, o el comercio al por mayor y al por menor, o el de servicios de gestión y empresariales aún tienen mucho recorrido, de acuerdo con el seguimiento que KPMG ha realizado sobre las cien primeras empresas españolas que publican informes de sostenibilidad. Otro resultado del estudio es que las empresas españolas se han decantado claramente por seguir las directrices del GRI para sus memorias.
Los indicadores de este estándar ayudan a las organizaciones a ordenar y homogeneizar los contenidos. Sin embargo, introducir cerca de 80 indicadores en una memoria puede ser origen de documentos muy voluminosos y de difícil manejo, aseguran en KPMG. 'Todo comienza en el índice.

Es crítico que la compañía que confecciona una memoria entienda los retos que el concepto desarrollo sostenible plantea a su organización y diseñe sus contenidos de forma que éstos aporten la información necesaria para que el lector pueda formarse opinión sobre el desempeño, los compromisos y objetivos de la compañía en esta materia' explica José Luis Blasco, director de Global Sustainability Services de KPMG en España. 'Una vez encontrado lo importante, podemos utilizar los indicadores de GRI que nos sean más útiles para informar'.

Según KPMG, a los lectores de este tipo de memorias les gustaría encontrar coherencia entre la estrategia de sostenibilidad y la estrategia general de la organización, compromisos concretos y objetivos, reflejo equilibrado de los impactos sobre el desarrollo sostenible de la empresa, una descripción honesta de las medidas adoptadas para abordar las cuestiones relacionadas con la sostenibilidad, planteamientos innovadores y una explicación acerca de la forma en la que la sostenibilidad se lleva a la práctica de los negocios locales.

La firma de servicios profesionales asegura que otra característica apreciada por los lectores de informes de RSC es la claridad en el lenguaje y el equilibrio y la concisión en los contenidos. 'Hay que evitar las siglas, las abreviaturas, los términos técnicos, la inclusión de glosarios o las explicaciones sobre el negocio puede ser de gran ayuda a lectores muchas veces pocos familiarizados con el tema', recomienda Blasco.
También hay consenso sobre la necesidad de disminuir el volumen de páginas de los documentos. 'En 2008 hemos podido ver cómo ya algunas compañías han elaborado resúmenes para disponer de documentos más manejables para aquellos que precisan de una visión global', dice el director de KPMG.

CLH es una de las empresas que han decidido este año publicar por primera vez su memoria de RSC. Fuentes de la compañía señalan que en la decisión ha tenido mucho que ver el convencimiento de que debían explicar a la sociedad las actividades que desarrollan y cómo las llevan a cabo. 'Hemos consultado a nuestros empleados, que han participado en grupos de discusión, y nos hemos entrevistado con ONG, además de analizar otras memorias del sector y estudiar lo que dicen de nosotros en los medios de comunicación.
La idea era seleccionar los asuntos de los que a su juicio deberíamos ocuparnos y tras conocerlos, informar de lo que hacemos'. En su memoria la empresa se compromete, entre otras cosas, a divulgar las RSC dentro de la compañía, a poner en marcha un programa de prevención con el objetivo de lograr cero accidentes y a seguir colaborando en los programas de acción social junto a sus empleados.
(Cinco Días)