Kimberly-Clark anuncia la reducción de un 25% en el consumo de agua en sus procesos productivos y el mantenimiento en la calidad de los efluentes, cumpliendo con las métricas establecidas en el marco de Visión 2015.

Este programa global de la compañía apunta a la mejora continua en la gestión del medio ambiente, fomentando la sustentabilidad en las personas, los productos y procesos. La corporación a nivel global tiene fijado como límite el consumo máximo de 30m3 de agua por tonelada producida. Gracias al gran esfuerzo y compromiso de los colaboradores con este desafío, la planta de Kimberly-Clark ubicada en Bernal Argentina ha alcanzado el objetivo de reducción y hasta se encuentra por debajo de esta métrica.

Kimberly-Clark trabaja implementando prácticas ambientalmente sustentables que aseguren la habilidad de seguir creciendo cuidando los recursos naturales no renovables y adaptando un enfoque preventivo para minimizar el impacto ambiental de sus operaciones.

Además de la reducción del consumo de agua, la compañía llevó adelante mejoras en la instalación de caudalímetros y la incorporación de nuevos filtros al sistema de tratamiento de efluentes.