Lanzan campaña para restringir el consumo de azúcar
Se presentó en España la campaña “25 gramos” que alerta de los peligros asociados al incremento del consumo de azúcar y que puso nerviosa a la industria alimentaria ya que exige que se regule su comercialización y publicidad. Reclaman un etiquetado claro y una política de impuestos sobre los alimentos no saludables. Global Health ha señalado que “la mayor cantidad de azúcar que consumimos proviene de bebidas envasadas, cereales, bollería y productos lácteos”.
“Existe un gran problema con la mala dieta y sus consecuencias”, ha señalado Javier Guzmán, director de VSF Justicia Alimentaria Global. Mientras la Organización Mundial de la Salud recomienda no sobrepasar los 25 gramos de azúcar al día, en el Estado español la media es de 112 gramos al día. Frente a esto es necesario reclamar medidas “para defender el derecho a una vida sana y saludable, así como el derecho a la alimentación”, ha subrayado Guzmán.
Para ello es necesario “un etiquetado claro, una publicidad regulada y una política de impuestos sobre los alimentos malsanos que sea coherente con las políticas de salud pública”, tal y como ha señalado Ferran Garcia, coordinador de la unidad de investigación y redes de VSF Justicia Alimentaria Global.
Existen alternativas que ya están funcionando con éxito en este sentido como el etiquetado de semáforos en Reino Unido, la prohibición de la publicidad antes y después de los espacios infantiles en Noruega o la aplicación de un impuesto a los refrescos azucarados en Francia.
En el marco de la campaña se ha hecho público el informe “PLANETA AZÚCAR: Las armas con las que la industria alimentaria domina nuestras vidas” durante una jornada celebrada en el Centro Cultural La Corrala en Madrid, en la que han participado miembros de la "Alianza por el control del azúcar".
“Las medidas que está poniendo en marcha la OMS para combatir los efectos del consumo de azúcar en la salud no están funcionando porque hoy por hoy en el mundo una persona muere por diabetes cada 7 segundos y casi la mitad de estas muertes se deben a sobrepeso y obesidad”, Anna Glayzer, representante de Consumers International.
En este mismo sentido, Ferran Garcia ha destacado que “en el Estado Español la mayor causa de mortalidad y de pérdida de calidad de vida es la mala alimentación, muy por encima del tabaco y del alcohol”. El sobrepeso en nuestro país afecta al 55% de la población y la obesidad al 17%. Entre la población infantil la pandemia se agrava, uno de cada dos niños (45,5%) padece sobrepeso u obesidad, encabezando la lista en Europa.
Por su parte Modi Mwatsama, nutricionista y miembro de la organización internacional Global Health ha señalado que “la mayor cantidad de azúcar que consumimos proviene de bebidas envasadas, cereales, bollería y productos lácteos” y ha subrayado la necesidad de un cambio de hábitos, “no solo para reducir el azúcar sino reducir el dulzor excesivo de los alimentos”. Así, la campaña pide también que se estudie la posibilidad de reducir los impuestos sobre las opciones alimentarias saludables.
Carles Miralles, miembro de la junta directiva de la ONG Medicus Mundi expresó que no podemos escoger realmente lo que comemos”. Esto es debido a que un 75% del azúcar que consumimos está oculto en alimentos procesados y el etiquetado no es claro. “Por culpa de la publicidad muchas veces incluso consumimos alimentos que consideramos saludables pero que en realidad contienen gran cantidad de azúcar”.
“La producción azúcar se da en forma de monocultivos industriales que siguen unas lógicas de cultivos que son altamente impactantes para los ecosistemas como la deforestación o la destrucción de hábitats muy valiosos y de biodiversidad”, ha añadido Abel Esteban, portavoz de Ecologistas en Acción y coordinador de la campaña sobre impactos en agrocombustibles.
La campaña “25 gramos” está impulsada por la Alianza por el Control del Azúcar compuesta por Access Info, Amigos de la Tierra, Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), Ecologistas en Acción, Medicus Mundi, No gracias, Plataforma Rural y VSF Justicia Alimentaria Global.
Para la Federación Española de Industrias de la Alimentación (FIAB) existe un amplio consenso científico a nivel internacional en torno al hecho de que no existen alimentos buenos o malos, sino una alimentación equilibrada o desequilibrada.
Considera que este tipo de campañas “cuentan con una base científica poco rigurosa y que en ocasiones faltan a la verdad, desprestigian a la alimentación y a la industria de la alimentación y bebidas, suponen una grave irresponsabilidad y solo conducen a sembrar dudas”.