“La comunidad internacional ha de entender que una transición justa hacia una economía con bajas emisiones de carbono es posible y puede convertir la acción climática en un impulsor del crecimiento económico sostenible y el progreso social. Tenemos que transformar la economía y por lo tanto exigimos un proceso justo enfocado a transformar cada uno de los sectores económicos en un sector sostenible”, añadió.

El movimiento sindical internacional intensificará sus esfuerzos en cuanto a la presión que ejerce para lograr un resultado ambicioso en Copenhague y en cuanto al mantenimiento de las menciones a una “Transición Justa” en el actual texto de negociación de la CMNUCC*, e instará también a los gobiernos a que añadan referencias específicas al requisito de consulta con los sindicatos y demás partes interesadas, promoviendo, entre otras cosas, el desarrollo de capacidades, la protección social y las políticas de diversificación económica. Otras demandas importantes guardan relación con la necesidad de que los países desarrollados tomen la iniciativa en las reducciones de emisiones de gases de efecto invernadero para conseguir que el incremento de la temperatura mundial se mantenga por debajo de 2°C, y proporcionen financiación suficiente para ayudar a los países en desarrollo a adaptarse.

Se ha desarrollado una nueva sección sobre cambio climática en el sitio web de la CSIcon el objetivo de apoyar a los sindicatos en sus esfuerzos por imponer un viraje hacia una sociedad más sostenible y una “economía verde” que mantenga puestos de trabajo decente y sustentos para todos.

“Una respuesta ambiciosa para el cambio climático precisa un apoyo lo más amplio posible. Ya es hora de establecer un consenso fuerte en torno a las políticas de cambio climático, algo únicamente posible si la sinceridad y la justicia social son integradas directamente a través de todo el proceso de toma de decisiones, incluidos los acuerdos internacionales”, concluyó Ryder.