Luego de la estatización la Fundación YPF cambió su misión
Luego que el Estado argentino retomara el control del 51% de la petrolera hubo un cambio en la visión de la compañía, o “nuevo ADN” como lo llaman en YPF, que según se conoció ayer trae aparejado la definición de un nuevo rumbo para la tradicional Fundación YPF. Será el propio nuevo CEO, Miguel Galuccio, quien la presida y apuntará todos los recursos y las acciones a “formar una nueva generación de petroleros” bajo el nuevo concepto de “educar para la energía”. Se supo que también dejaría de apoyar iniciativas de cuidado del espacio público de la Ciudad de Buenos Aires. ”Significa un giro de 180 grados respecto del rol que tenía la Fundación”, dice la empresa.
“El replanteo estratégico alcanza los lineamientos que ya fueron anunciados y apuntan a revertir el declino en la producción y a aumentar las reservas de gas y de petróleo, a hacer crecer la producción de hidrocarburos, al mismo tiempo que transformar a YPF en una empresa profesional, competitiva, atractiva para inversores y rentable para sus accionistas. Este cambio en la visión de la compañía, o nuevo ADN, trae aparejado la definición de un nuevo rumbo para la Fundación YPF”, expresan voceros de la empresa.
El nuevo concepto de la Fundación es “educar para la energía”. Para apuntalar ese concepto estratégico, la Fundación tendrá, como explicó Galuccio a sus empleados, un eje de acción en “los lugares y las comunidades en los cuales YPF opera extrayendo petróleo y gas, y tendrá como razón central priorizar la educación y la formación de los trabajadores en general y de los profesionales¨ en varios programas:
1) Articulará un programa de capacitación técnica con los sindicatos para los 50 mil trabajadores de YPF (15.000 propios y 35.000 de empresas contratistas). El objetivo es elevar la productividad y seguridad del trabajo en los pozos, en las refinerías y en la exploración. Se dictarán cursos destinados a la salud, seguridad y medio ambiente (otro de los objetivos primordiales de la nueva gestión) y a la adaptación a las nuevas tecnologías para adecuarse a los tiempos modernos que requiere la industria.
2) Promoverá la vocación de jóvenes estudiantes secundarios, especialmente los que concurren a Escuelas Técnicas, para que vuelquen su elección hacia carreras tales como ingeniería en petróleo, geofísica, geología e ingeniería ambiental. Para eso, pondrá en marcha un vasto plan de becas y de promoción de esas carreras. Los profesionales en estas disciplinas hoy son escasos para cubrir la demanda futura del crecimiento energético. “Revertir el desbalance energético requerirá más actividad, más profesionales, más trabajadores capacitados”, indicó Galuccio.
3) La Fundación YPF articulará y promoverá también carreras de posgrado y máster vinculados con la especialización en el gas y el petróleo no convencional, tecnología en la que YPF ya es y pretende además consolidarse como líder en América Latina. Para la promoción de carreras de posgrado y máster se cerrarán acuerdos con universidades nacionales e internacionales, especializadas en los temas relacionados con la energía.
Este foco en la “educación para la energía” hizo que se convocara a profesionales que ya están colaborando en el armado de un consejo consultivo de la Fundación, entre los cuales figuran Juan Carlos Tedesco (un hombre de vasta trayectoria en educación, ciencia y la tecnología, ex ministro de Educación y ex secretario de Ciencia y Tecnología, miembro de la Unesco), el ex ministro de Educación y actual senador nacional, Daniel Filmus, y el periodista, matemático y divulgador científico Adrián Paenza. La actividad se realizará en estrecha colaboración con los Ministerios de Trabajo (Carlos Tomada), Ciencia y Tecnología (Lino Barañao) y Educación de la Nación (Alberto Sileoni), quienes ya comprometieron su apoyo y dedicación.
“No nos olvidemos que la educación colabora de manera estrecha con la formación de trabajadores más capacitados, que son el motor para producir más y mejor. Eso ocurre en el mundo y mi intención es reproducirlo en la Argentina, donde ya contamos con el talento y el esfuerzo de la gente, sólo tenemos que brindarles las condiciones”, dijo Galuccio.Por eso, todos los recursos –económicos y estratégicos– estarán volcados prioritariamente a apuntalar el objetivo primordial que se plantea YPF para este momento. Lo que significa un giro de 180 grados respecto del rol que tenía la Fundación YPF.
Hasta 2011, con la empresa enteramente en manos privadas, la visión de la Fundación YPF era “contribuir a que la República Argentina alcance los requisitos necesarios para participar activamente en un mundo que tiende hacia la integración” y su misión consistía en “promover, participar, estimular, llevar a cabo e intervenir en toda clase de iniciativas u obras de carácter educacional y de fomento de la investigación y desarrollo, en especial las relacionadas con las áreas petroquímicas, energéticas y mineras, priorizando el sector de los hidrocarburos”.
Esta semana, diversos medios argentinos dieron por cierto que la Fundación YPF había suspendido o puesto "en revisión" contratos de publicidad y patrocinio, como los de la protección del espacio público. Por ejemplo, un histórico contrato de más de veinte años para el cuidado del parque El Rosedal de la Ciudad de Buenos Aires habría sido ya discontinuado.