"Creo extremamente importante tener consciencia de que cuanto más petróleo, mejor, pero eso no significa que dejemos de invertir en biodiesel y etanol, porque son dos fuentes energéticas extraordinarias para descontaminar el planeta y para generar millones de empleos", dijo Lula en su programa semanal de radio.

El mandatario brasileño confió en que Petrobras consiga encontrar más crudo, para que Brasil sea "cada vez más fuerte, más rico" y que el pueblo "tenga una vida mejor".
Resaltó el "potencial extraordinario" que otorga el petróleo para "resolver parte de los problemas económicos" de Brasil, entre los que citó la educación y la pobreza.

"Es casi la segunda independencia de Brasil", dijo Lula, repitiendo las palabras que pronunció el pasado viernes, cuando participó en la ceremonia que marcó el inicio de la producción en el campo marítimo de Tupí, el mayor descubierto en el país y con reservas calculadas de entre 5.000 y 8.000 millones de barriles.

Lula incidió en que este momento abre "una nueva era", aunque reconoció que todavía no se sabe qué volumen de petróleo se encuentra en el área conocida como "pre sal", una enorme región geológica ubicada a grandes profundidades y a más de 2.000 metros bajo una capa salina en el lecho del Atlántico.

Tupí es la mayor reserva de petróleo descubierta en el mundo en los últimos 30 años, según Petrobras, y cuenta con crudo ligero, de gran calidad (28 grados en la escala API).

La Agencia Nacional de Petróleo (organismo regulador) calcula que las reservas en áreas del "pre sal" pueden alcanzar los 80.000 millones de barriles de petróleo, casi seis veces más que las actuales existencias comprobadas de Brasil, que ascienden a 14.000 millones de barriles.

Esta cifra podría convertir a Brasil en un exportador neto de petróleo y derivados, lo que ha llevado al Gobierno a plantearse solicitar en un futuro el ingreso en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

(EFE)