Medidas para calentamiento global

23.08.2011 | Mundo

"China no considera aceptable que se impongan a los países en desarrollo compromisos en reducción de emisiones, pero se fija la meta de reducir el consumo energético un 20% en 2010, lo que disminuirá su emisión de gases de efecto invernadero", afirmó Ma Kai, presidente del máximo organismo planificador del gobierno de Pekín.


 

Ma ha reconocido que China desplazará a USA como principal emisor de CO2 del mundo (en 2008, según la Agencia Internacional de la Energía) aunque el nivel per cápita de emisiones seguirá siendo "sólo una quinta parte del estadounidense".
Pekín, ha dicho, está comprometido con cambiar su actual modelo de crecimiento por uno más sostenible con mayor peso de las energías renovables, nuevas variedades de cosechas resistentes a la sequía y más superficies forestales.
En opinión de Ma, la propuesta de la Unión Europea para evitar que la temperatura global se eleve en más de 2C respecto a 2000 y para ello reducir las emisiones de CO2 en un 50% en el horizonte de 2050 "es prueba de prueba esfuerzos pero la cifra carece de base científica y requiere más estudio".
Acerca de la más reciente propuesta para luchar contra el cambio climático del presidente de USA, George W. Bush, Ma ha considerado que, aunque supone "un cambio positivo de actitud", debe ser complementaria al Protocolo de Kyoto (no firmado por Washington) y la Convención de la ONU sobre Cambio Climático (UNFCCC). "Además, debería incluir el principio de Kyoto de responsabilidad compartida pero diferente entre los países en desarrollo y desarrollados".
El responsable chino ha insistido en que China necesita "urgentemente" la transferencia de tecnología de los países desarrollados para combatir el cambio climático y adaptarse a él. 
"No hemos visto demasiada acción en la ayuda financiera y técnica a los países en desarrollo (como establece el Protocolo de Kyoto). "Esperamos que los países industrializados cumplan sus obligaciones y den ese apoyo", ha afirmado, antes de advertir de que las compañías extranjeras que invierten en industrias de alto consumo energético en China son también responsables de las emisiones del país.
El nuevo plan chino apuntala la posición defendida por Pekín de que los países desarrollados y sus 200 años de industrialización son los principales causantes del calentamiento global, por lo que tienen la "responsabilidad básica" de reducir las emisiones. "La comunidad internacional debería respetar el derecho de los países en desarrollo a modernizarse e industrializarse", ha declarado Ma. 
Según los últimos datos disponibles, China emitió en 2004 el equivalente a 6.100 millones de toneladas de CO2, el 75% procedente de la combustión de energías fósiles, como el carbón y el petróleo.
Hay una repercusión real de los abusos contaminantes chinos: sus glaciares occidentales se están derritiendo tan rápido que podrían haber desaparecido en su mayoría para finales de siglo, secando parte de los ríos a los que actualmente nutren, informó la propia agencia oficial de noticias Xinhua.
Los ríos de hielo en la meseta Qinghai-Tíbet, límite de los Himalayas, que tienen en el sobrenombre de "el techo del mundo", representan alrededor de 4/5 partes de los glaciares de China, dijo Xinhua.
Pero las últimas 3 décadas se han retirado a una tasa de alrededor de 131 kilómetros por año, sobre todo debido al calentamiento global, según la información.
"Si los glaciares continúan derritiéndose a la velocidad actual, la mayoría de ellos habrán desaparecido y los ríos cercanos se habrán secado para el 2100", declaró a Xinhua Yao Tandong, director del Instituto de Investigación de la meseta Qinghai-Tíbet, de la Academia China de la Ciencia.
De esta región proceden varios de los ríos más importantes e icónicos de Asia, incluidos el Yangtze, el Indus y el Mekong, así que una caída en los niveles de las aguas podría afectar potencialmente a millones de personas.
El derretimiento también está teniendo más efectos río arriba, donde se están formando depósitos de agua, inundando a los residentes que viven junto a los ríos, y después poniendo en peligro a la gente que vive río abajo, según informaciones recientes.
Una Valoración Nacional sobre el Cambio Climático predijo el año pasado una retirada más lenta de los glaciares; para 2100 los glaciares de las regiones montañosas de Qinghai-Tíbet podrían disminuir en dos terceras partes.
Sin embargo un informe de Greenpeace citó un pronóstico que aseguraba que el 80 por ciento de la zona glacial en el Tíbet y alrededores podría desaparecer en 2035.
Los glaciares en toda la nación se han secado un siete por ciento, o 389 Km3, desde la década de los '60, según una investigación del equipo de Yao.
Por todo esto, el plan nacional de China para hacer frente al cambio climático, que no mencionó directamente los glaciares, parece ridículo.

Ma ha reconocido que China desplazará a USA como principal emisor de CO2 del mundo (en 2008, según la Agencia Internacional de la Energía) aunque el nivel per cápita de emisiones seguirá siendo "sólo una quinta parte del estadounidense".

Pekín, ha dicho, está comprometido con cambiar su actual modelo de crecimiento por uno más sostenible con mayor peso de las energías renovables, nuevas variedades de cosechas resistentes a la sequía y más superficies forestales.
En opinión de Ma, la propuesta de la Unión Europea para evitar que la temperatura global se eleve en más de 2C respecto a 2000 y para ello reducir las emisiones de CO2 en un 50% en el horizonte de 2050 "es prueba de prueba esfuerzos pero la cifra carece de base científica y requiere más estudio".
Acerca de la más reciente propuesta para luchar contra el cambio climático del presidente de USA, George W. Bush, Ma ha considerado que, aunque supone "un cambio positivo de actitud", debe ser complementaria al Protocolo de Kyoto (no firmado por Washington) y la Convención de la ONU sobre Cambio Climático (UNFCCC). "Además, debería incluir el principio de Kyoto de responsabilidad compartida pero diferente entre los países en desarrollo y desarrollados".

El responsable chino ha insistido en que China necesita "urgentemente" la transferencia de tecnología de los países desarrollados para combatir el cambio climático y adaptarse a él. "No hemos visto demasiada acción en la ayuda financiera y técnica a los países en desarrollo (como establece el Protocolo de Kyoto). "Esperamos que los países industrializados cumplan sus obligaciones y den ese apoyo", ha afirmado, antes de advertir de que las compañías extranjeras que invierten en industrias de alto consumo energético en China son también responsables de las emisiones del país.
El nuevo plan chino apuntala la posición defendida por Pekín de que los países desarrollados y sus 200 años de industrialización son los principales causantes del calentamiento global, por lo que tienen la "responsabilidad básica" de reducir las emisiones. "La comunidad internacional debería respetar el derecho de los países en desarrollo a modernizarse e industrializarse", ha declarado Ma. Según los últimos datos disponibles, China emitió en 2004 el equivalente a 6.100 millones de toneladas de CO2, el 75% procedente de la combustión de energías fósiles, como el carbón y el petróleo.
Hay una repercusión real de los abusos contaminantes chinos: sus glaciares occidentales se están derritiendo tan rápido que podrían haber desaparecido en su mayoría para finales de siglo, secando parte de los ríos a los que actualmente nutren, informó la propia agencia oficial de noticias Xinhua.
Los ríos de hielo en la meseta Qinghai-Tíbet, límite de los Himalayas, que tienen en el sobrenombre de "el techo del mundo", representan alrededor de 4/5 partes de los glaciares de China, dijo Xinhua.

Pero las últimas 3 décadas se han retirado a una tasa de alrededor de 131 kilómetros por año, sobre todo debido al calentamiento global, según la información.
"Si los glaciares continúan derritiéndose a la velocidad actual, la mayoría de ellos habrán desaparecido y los ríos cercanos se habrán secado para el 2100", declaró a Xinhua Yao Tandong, director del Instituto de Investigación de la meseta Qinghai-Tíbet, de la Academia China de la Ciencia.
De esta región proceden varios de los ríos más importantes e icónicos de Asia, incluidos el Yangtze, el Indus y el Mekong, así que una caída en los niveles de las aguas podría afectar potencialmente a millones de personas.
El derretimiento también está teniendo más efectos río arriba, donde se están formando depósitos de agua, inundando a los residentes que viven junto a los ríos, y después poniendo en peligro a la gente que vive río abajo, según informaciones recientes.

Una Valoración Nacional sobre el Cambio Climático predijo el año pasado una retirada más lenta de los glaciares; para 2100 los glaciares de las regiones montañosas de Qinghai-Tíbet podrían disminuir en dos terceras partes.
Sin embargo un informe de Greenpeace citó un pronóstico que aseguraba que el 80 por ciento de la zona glacial en el Tíbet y alrededores podría desaparecer en 2035.
Los glaciares en toda la nación se han secado un siete por ciento, o 389 Km3, desde la década de los '60, según una investigación del equipo de Yao.
Por todo esto, el plan nacional de China para hacer frente al cambio climático, que no mencionó directamente los glaciares, parece ridículo.