"Contención" es la primera palabra que enuncia Susana Rodríguez cuando se le pregunta sobre el rol social de la cooperativa El Ceibo. Desde sus 47 años muestra orgullosa la credencial que la identifica como recicladora. "Antes era recolectora en la vía pública, pero ahora trabajo en el taller reciclando los materiales que traen los recolectores de la calle", nos cuenta orgullosa.
Cartones prensados que se transforman en sillones o mesas ratonas; tubos plásticos de sifones que se vuelven individuales y botellas de vidrio de gaseosa que se cortan para convertirlos en vasos de vistosos colores. Todo realizado por ex cartoneros bajo la atenta supervisión de las modernas diseñadoras del estudio Mu!
Todos estos objetos forman parte del entorno del bar El Apile,  que desde el San Telmo profundo regala a sus comensales la oportunidad de experimentar con estos muebles y esta vajilla sorprendentes.
"Me parece una alianza potente porque tiene todos los componentes de sustentabilidad: la económica, la social, la ambiental y la cultural", sostiene Carlos March, representante de Avina Buenos Aires, quien también destacó el   potencial de replicabilidad que tiene esta iniciativa.