El objetivo es promover la aplicación de los Principios Rectores sobre Derechos Humanos y Empresas a través de la calificación del rendimiento de las empresas para que sirva de base para impulsar la transparencia en la materia.

En su desarrollo participará EIRIS, el Centro de Recursos sobre Empresas y DD.HH., el Instituto de Derechos Humanos y Empresas, y la mesa redonda de rendimiento corporativo.

Phil Bloomer del Centro de Recursos de Empresas y Derechos Humanos dijo: "Nuestra clasificación premiará las buenas prácticas de las empresas, y creará un incentivo importante para los que tengan que mejorar rápidamente. La clasificación será una herramienta para los activistas, los sindicatos, los inversores y los gobiernos para fomentar el respeto, la dignidad y las libertades fundamentales de los trabajadores, comunidades vecinas, y las sociedades en las que invierten." 

"El riesgo en relación con los derechos humanos es un tema clave para los inversores que son cada vez más conscientes de proteger sus activos, este marco será una herramienta de diligencia debida crítico para evaluar cómo las empresas gestionan esos riesgos", dijo Peter Webster de EIRIS.