Un gigante de las golosinas certificará comercio justo

08.06.2011 | Contratapa

Cadbury –una de las mayores empresas de golosinas del mundo- anunció el inicio del proceso para la certificación de sus chocolates Dairy Milk por la Fairtrade Foundation, entidad independiente que incentiva el comercio justo y sustentable. La compañía será la primera del mundo en el segmento golosinas que busca el sello de aval de la reconocida organización. El proceso de certificación de Fairtrade mostrará, el compromiso de Cadbury con el desarrollo de las compañías que trabajan buscando un comercio ético y sustentable.


 

El mejor ejemplo de ello es el trabajo desarrollado junto a los trabajadores de cacao de Ghana, desde el año pasado, cuando la empresa anunció el “Cadbury Cocoa Partnership”, con el objetivo de garantizar la sustentabilidad económica, social y ambiental de las plantaciones de cacao del país africano. De esta manera, la compañía reafirmó el compromiso con los productores locales dado que la empresa mantiene la comercialización del cacao ghanés desde hace más de 100 años. 
 
El Programa cumplió, un año en el mes de febrero y, desde su lanzamiento, más de US$ 45 millones fueron invertidos en el cultivo sustentable de cacao.
Cadbury trabajará en la obtención del certificado de Comercio Justo para sus Chocolates Dairy Milk de los mercados de Gran Bretaña e Irlanda. El chocolate de Ghana es reconocido como el de mejor calidad del mercado.
Programa
El Programa Cadbury Cocoa Partnership tiene por objetivo aumentar la productividad de las plantaciones locales y mostrar los beneficios del cultivo de cacao para las generaciones futuras.
Para ello, el proyecto posee las siguientes metas: aumentar los ingresos de los productores de cacao, colaborando en la mejora de la calidad de los granos, y no en el aumento de los mismos. Introducir nuevas fuentes de ingreso, como la viabilidad de pequeños empréstitos y el incentivo a la cultura de otros productos, invertir en el desarrollo de la comunidad, por medio de la ayuda a la mejora de la educación, la implementación de proyectos de biodiversidad, construcción de reservorios de agua potable y, finalmente, trabajar en conjunto, desarrollando un modelo pionero desde sus fundaciones. Productores, gobierno, ONGs y agencias internacionales trabajarán juntas para decidir cómo el fondo (disponible para el proyecto) será invertido, y para implicar a las organizaciones locales.

El mejor ejemplo de ello es el trabajo desarrollado junto a los trabajadores de cacao de Ghana, desde el año pasado, cuando la empresa anunció el “Cadbury Cocoa Partnership”, con el objetivo de garantizar la sustentabilidad económica, social y ambiental de las plantaciones de cacao del país africano.

De esta manera, la compañía reafirmó el compromiso con los productores locales dado que la empresa mantiene la comercialización del cacao ghanés desde hace más de 100 años.  El Programa cumplió, un año en el mes de febrero y, desde su lanzamiento, más de US$ 45 millones fueron invertidos en el cultivo sustentable de cacao.
Cadbury trabajará en la obtención del certificado de Comercio Justo para sus Chocolates Dairy Milk de los mercados de Gran Bretaña e Irlanda. El chocolate de Ghana es reconocido como el de mejor calidad del mercado.

Programa

El Programa Cadbury Cocoa Partnership tiene por objetivo aumentar la productividad de las plantaciones locales y mostrar los beneficios del cultivo de cacao para las generaciones futuras.

Para ello, el proyecto posee las siguientes metas: aumentar los ingresos de los productores de cacao, colaborando en la mejora de la calidad de los granos, y no en el aumento de los mismos. Introducir nuevas fuentes de ingreso, como la viabilidad de pequeños empréstitos y el incentivo a la cultura de otros productos, invertir en el desarrollo de la comunidad, por medio de la ayuda a la mejora de la educación, la implementación de proyectos de biodiversidad, construcción de reservorios de agua potable y, finalmente, trabajar en conjunto, desarrollando un modelo pionero desde sus fundaciones.

Productores, gobierno, ONGs y agencias internacionales trabajarán juntas para decidir cómo el fondo (disponible para el proyecto) será invertido, y para implicar a las organizaciones locales.