Deporte por la comunidad y el medio ambiente
Una liga de fútbol en Punta Gorda, distrito de Toledo en Belice, que fomenta con éxito la participación de la comunidad en el manejo sostenible del frágil ecosistema del Corredor marino de la montaña maya, será presentada en Ciudad de Guatemala. La reunión, organizada por el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales de Guatemala y la CEPAL, dará a conocer una novedosa manera de sumar un torneo de fútbol con el cuidado efectivo de un entorno frágil.
El miércoles 9 de marzo, de las 9:30 a.m. a las 1:00 p.m. tendrá lugar el Encuentro para la réplica creativa de experiencias innovadoras de educación ambiental y deporte, organizado por la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (CEPAL) y el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales de Guatemala.
Inaugurarán el evento Luis Alberto Ferraté, Ministro de Ambiente y Recursos Naturales de Guatemala, y María Elisa Bernal, directora del proyecto Experiencias en innovación social de la CEPAL.
Celia Mahung, Directora Ejecutiva del Toledo Institute for Development and Environment (TIDE), de Belice, presentará el trabajo de la Copa de Agua Fresca de la Liga Medioambiental de Fútbol. Comentarán Justa de Monney, Directora General de Formación, Organización y Participación Social del Ministerio mencionado, y Mario Abel Díaz, Coordinador Nacional del Corredor Biológico Mesoamericano.
La pasión por el fútbol ha llevado a la participación de la comunidad local en el manejo sostenible del frágil ecosistema. La Copa reúne a los equipos infantiles y adultos de las comunidades en un torneo anual con el requisito de hacer un proyecto ecológico: limpieza del río y playas, control de la erosión, plantación de especies nativas, manejo de la basura, de acuerdo con las posibilidades de los miembros del equipo.
Los partidos tienen lugar en Punta Gorda, ciudad accesible a todas las comunidades. Antes de jugar, cada equipo expone los avances de su proyecto ambiental. En los últimos cuatro años más de mil jugadores han participado en la Copa y unas diez mil personas han colaborado en los proyectos ambientales.
Según María Elisa Bernal, "Es de enorme utilidad involucrar a jóvenes, niños y niñas en el desarrollo de una conciencia ambiental, ya que ellos "enseñan" a los adultos nuevos hábitos. Además, tradiciones comunitarias como el juego del fútbol vinculan a la población en actividades positivas".
Agrega que la "simpleza del modelo, su bajo costo y fácil replicabilidad lo hacen único ya que aprovecha la pasión por el fútbol para sumar a la población al cuidado del medio ambiente".
La iniciativa del TIDE ganó el concurso Experiencias en innovación social, organizado por CEPAL con apoyo de la Fundación Kellogg, ciclo 2007-2008.