La Unión Europea no ampliará la baja por maternidad
Los grupos políticos del Parlamento Europeo (PE) no lograron llegar a un acuerdo este miércoles 6 de mayo para aprobar la extensión de la baja de maternidad hasta un mínimo de 20 semanas en toda la UE ni para obligar a instaurar un permiso de paternidad.
Con el apoyo de la mayoría de los grupos Popular y Liberal, el pleno de la Eurocámara decidió devolver el asunto a la comisión parlamentaria competente, al considerar que el texto no es lo suficientemente claro y que muchas de las enmiendas presentadas son contradictorias. A esta postura se opusieron la ponente del informe, la socialista portuguesa Edite Estrela, y la izquierda del hemiciclo.
Para el eurodiputado de Iniciativa Per Catalunya Verds (ICV) y vicepresidente de la comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género del PE, Raül Romeva, la decisión del pleno muestra que "la mayoría de derechas impide cualquier avance" en el campo de la conciliación de la vida personal y laboral y la igualdad. "Esto es un paso atrás inaceptable", subrayó Romeva, quien indicó que la tramitación del expediente en el Parlamento Europeo tendrá que volver a empezar "prácticamente de cero".
El grupo Socialista, por su parte, calificó de "indigna" la actitud de liberales y conservadores. "La derecha ha mostrado su verdadera cara traicionando el bienestar de millones de mujeres que aspiran a conciliar su vida familiar y profesional", dijo su líder, el alemán Martin Schulz, quien anunció que este dossier será una de las prioridades de su grupo de cara a la próxima legislatura.
Grupos políticos con opiniones distantes
La división entre los grupos políticos, que tenían opiniones distantes sobre la duración mínima que se debe garantizar para las bajas de maternidad y otros aspectos de la reforma, hará que el asunto pase a manos del nuevo Parlamento que surgirá de las elecciones europeas de junio.
En principio, el compromiso que tenía previsto votar la Eurocámara abogaba por extender hasta 20 semanas el periodo mínimo de las bajas por maternidad en los Veintisiete, una postura que contrasta con la de los gobiernos de la Unión Europea (UE), que ni siquiera aceptan la ampliación hasta las dieciocho semanas que había propuesto laComisión Europea.
Diferencias entre países
Actualmente, la legislación europea garantiza una baja de maternidad mínima de 14 semanas, pero la situación varía en gran medida a lo largo de la UE, pues en algunos países alcanza las 28 semanas. En España está en vigor un período de 16 semanas, de las cuales las seis primeras tras el parto son obligatorias para la madre, mientras que el resto se puede transferir al cónyuge.
La prestación económica es equivalente al total del último sueldo de la madre durante toda la baja, lo que no garantizan todos los Estados miembros. En otros países, como Suecia, la baja de maternidad incluye siete semanas antes del parto más siete después y es posible extenderla hasta que el niño cumpla dieciocho meses. En Alemania, el periodo obligatorio es de 14 semanas (seis antes del nacimiento y ocho después), mientras que Francia tiene, al igual que España, un mínimo estipulado de baja de 16 semanas.
Los eurodiputados defendían que las seis primeras semanas de baja sean obligatorias, como en España, para facilitar la lactancia, y que durante ese periodo el Estado abone el cien por cien del último sueldo de la madre. Asimismo, el informe que había aprobado la comisión parlamentaria exigía la introducción de una baja de paternidad de dos semanas obligatoria y remunerada íntegramente. En principio, ninguna de estas ideas es aceptada por los Estados miembros, por lo que ya estaba previsto que la tramitación de la reforma tuviese que continuar en los próximos meses.
(EFE / Expansión)