Consumidores “premian” a las peores empresas
El Premio a las Peores Empresas de Consumers International (CI) destaca el comportamiento irresponsable de algunas de las marcas más conocidas en el mundo, llamando la atención sobre inaceptables abusos de los derechos de los consumidores en los últimos 12 meses. Las finalistas se elijen entre los nombres propuestos por organizaciones miembros de CI y otros grupos invitados.Tesco (Premio del Mazo por silenciar las críticas), Kellogg’s y Lego (Premio al Peligro Obvio por los dulces que imitan bloques Lego), Eli Lilly (Premio a la Sobredosis de Promoción por la comercialización desenfrenada) y Samsung (Premio a la Actividad Suplementaria por vender tanques, además de televisores).
Las nominaciones son propuestas por organizaciones miembros de CI, el personal de CI y terceros invitados a participar.
Un jurado compuesto por la secretaría de CI y expertos de organizaciones miembros de CI, selecciona a las ganadoras mediante un criterio general que busca llamar la atención sobre el abuso de los derechos de los consumidores en todo el mundo.
La selección se fundamenta en los méritos relativos de las propuestas y no pretende ser ni científica ni exhaustiva.
Tesco interpuso demandas contra Jit Siratranont, Kamol Kamoltrakul y Nongnat Hanwilai por US$28.6 millones, US$2.86 millones, y US$2.86 millones, respectivamente, por comentar a través de los medios de comunicación locales la expansión de la empresa de retail en Tailandia.
Este año el gigante británico de las ventas al detalle está demandando a tres ciudadanos tailandeses por la sideral suma de US$34.32 millones (más intereses) luego que denunciaran el impacto del crecimiento de Tesco sobre negocios y consumidores locales.
Lego y Kellogg’s tuvieron la no tan brillante idea de sacar provecho de la predilección de los niños por los bloques de Lego, produciendo bloques comestibles de caramelo de aspecto idéntico al real.
Luke Upchurch, Jefe Global de Medios de Consumers International expresó que“a veces, incluso las principales empresas multimillonarias que poseen las mentes más creativas, deben hacer una pausa, respirar hondo, y preguntarse ‘Este proyecto ¿es una buena idea?’ Fun Snacks definitivamente es uno de esos casos. Nuestra sugerencia es que Kellogg’s regrese a la mesa de dibujo para pensar en cómo hacer que los niños coman alimentos más sanos y no imitaciones comestibles de juguetes.”
Eli Lilly se lleva este año el Premio a la Sobredosis de Promoción por la comercialización de su medicamento contra la disfunción eréctil, Cialis. Las ventas globales de este medicamento alcanzaron los US$1.100 millones en 2007, haciendo que éste sea uno de los productos de mayor venta de Lilly. Esta cifra no sorprende si se considera que la empresa invirtió US$152 millones en la promoción de este medicamento solamente en EE.UU.
Un estudio de este año conducido por Consumers Union, organización estadounidense miembro de CI, informó que menos de la mitad de los hombres que utilizan medicamentos para tratar la disfunción eréctil los consideraban eficaces. Un tercio, además, informó haber experimentado reacciones secundarias. En octubre de este año la autoridad que controla a la industria farmacéutica en el Reino Unido (RU) censuró a Lilly por no ofrecer información adecuada sobre los efectos secundarios de Cialis en su promoción por internet y en consultorios.
Ofrecer una amplia variedad de productos es la norma para las marcas comerciales multinacionales. En particular, las empresas del área electrónica pueden abarcar desde teléfonos celulares, a televisores de pantalla plana. Samsung, sin embargo, parece haber llevado esto de la variedad a límites completamente nuevos, con una línea muy lucrativa de carros blindados. El producto estrella de Samsung-Techwin, la filial del gigante electrónico coreano que fabrica productos militares, es el tanque con un cañón howitzer K-9 Thunder. Este carro de combate es utilizado por los ejércitos de Corea y Turquía, entre otros.