Biocombustibles: ¿opción viable?
Muchos, en la política y la ciencia, ven a los biocombustibles como una fuente limpia y renovable de energía y una alternativa para reducir la emisión de gases contaminantes y el deterioro del medio ambiente Sin embargo, un nuevo estudio del Instituto de Ciencia y Tecnología del Medio Ambiente de la Universidad de Barcelona afirma que el uso de biocombustibles conlleva un impacto negativo tanto económico, social, como medioambiental.
Producción
Los biocombustibles, como el biodiesel y el etanol, se derivan de productos orgánicos como el maíz, caña de azúcar, aceites vegetales o estiércol de vaca.
"El principal argumento a favor de los biocombustibles es que ayudarán a reducir la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera" dijo a BBC Ciencia Daniela Russi, quien llevó a cabo la investigación.
Brasil ha utilizado bioetanol en sus autos desde hace años. Sin embargo tal como señala Daniela Russi, "un análisis más detallado del ciclo de vida del biodiesel revela que el ahorro de energía y de CO2 no es tan alto como se piensa, e incluso podría ser negativo".
La materia prima que se usa en la producción de biocombustibles se obtiene mediante agricultura intensiva.
"Este sistema implica un alto uso de fertilizantes, pesticidas y maquinaria, ya que con métodos agrícolas menos intensivos, la producción sería mucho menor y los requerimientos de tierra y costos serían mucho más altos", afirma Russi.
"Este proceso requiere además del uso de combustibles fósiles (carbón y petróleo) tanto durante las fases de producción como en el transporte desde y hacia las plantas de procesamiento".
Contaminación
Otro argumento que a menudo escuchamos a favor de los biocombustibles es la contaminación urbana.
Estos combustibles no sólo se ven como una opción "verde" global y local para reducir la contaminación del tráfico y todos los problemas de salud asociados a ésta.
La única forma posible de reducir el uso de combustibles fósiles y el impacto en el medio ambiente es modificar nuestros patrones de consumo.
Para Daniela Russi de la Universidad Autónoma de Barcelona: "En realidad -dice Daniela Russi- las ventajas en este aspecto son muy modestas".
Según la investigadora si se sustituyera la gasolina diesel con una mezcla de 5.75% de biodiesel -tal como intenta establecer la Unión Europea- los óxidos de nitrógeno (NOx) aumentarían de forma insignificante y los hidrocarburos (HC) y el monóxido de carbono (CO) disminuirían respectivamente 6% y 3%.
"Frente a estas modestas ventajas, las desventajas de la producción a gran escala de biodiesel, son enormes".
Estas desventajas, dice, incluyen los enormes requerimientos de tierra para cultivar, la sustitución de cosechas alimenticias por monocultivos, la deforestación para cultivos energéticos.
Esto a su vez conduciría a la desaparición de la biodiversidad, la disminución de tierras fértiles y agua y los efectos sociales negativos como el desplazamiento de comunidades locales.
Costo del maíz
Otra posible consecuencia, afirman los investigadores, es la reducción en la disponibilidad de alimentos.
Un ejemplo reciente se vio con el precio del maíz en Estados Unidos que aumentó a su valor más alto en 10 años debido a la creciente demanda en ese país de bioetanol derivado de maíz.
México -principal importador de maíz de Estados Unidos- resultó especialmente afectado ya que la gente debió pagar hasta 30% más por uno de sus alimentos básicos: la tortilla de maíz.
"En conclusión -dice Daniela Russi- el biodiesel no contribuirá a la solución de los problemas derivados de nuestra dependencia en los combustibles fósiles". "Incluso -agrega- ésa es una idea que puede ser hasta peligrosa"."Porque podría fomentar un falso optimismo de que hay una solución tecnológica para resolver el problema de nuestra excesiva dependencia a los combustibles fósiles". "Y la única forma posible de lograrlo es modificar nuestros patrones de consumo con medidas de ahorro energético y de diversificación de fuentes de energía".
(BBC / Comfia)