La Comisión Europea propone la bases para un mercado europeo de fondos de inversión social
La propuesta de Reglamento de la Comisión tiene como objetivo estimular la financiación de empresas sociales, es decir, de aquellas empresas cuyos objetivos empresariales van más allá del logro de beneficios y que pretenden tener un impacto social positivo. Las medidas están encaminadas asimismo a garantizar la transparencia en la información que reciben los inversores en relación con este tipo de empresas.
Entre las medidas propuestas por la Comisión para estimular el emprendimiento social, se encuentra la creación de un distintivo europeo que reconozca los fondos de emprendimiento social. Este Fondo Europeo de Emprendimiento Social permitirá a los inversores localizar con mayor facilidad a este tipo de fondos, al tiempo que facilitará la diferenciación con otro tipo de fondos de inversión de naturaleza distinta.
Para obtener este distintivo los responsables del fondo deberán acreditar que al menos el 70% del fondo se encuentra orientado a inversiones en emprendimiento social, así como garantizar la buena conducta de los gestores. Se examinará además que no existen conflictos de intereses y la sostenibilidad de los acuerdos organizativos. En el momento en el que alguno de estos elementos no se cumplan, las autoridades nacionales podrán retirar el distintivo, lo que provocará que el fondo no esté habilitado para operar en el resto del mercado comunitario.
Con el fin de mejorar la transparencia y facilitar el acceso de los inversores a la información necesaria, los fondos que obtengan este distintivo deberán publicar sus datos. Se incluirán además una serie de medidas sobre el seguimiento y la medición de las repercusiones sociales de este tipo de proyectos. Esto contribuirá a mejorar la capacidad de elección de los inversores. No obstante, dada la complejidad de este instrumento, el distintivo estará únicamente destinado por el momento a inversores profesionales. La Comisión estudiará una futura apertura a los inversores minoristas.
Actualmente las empresas sociales representan alrededor del 10% del tejido empresarial europeo y dan empleo a unos once millones de trabajadores. Tal y como se planteó en la presentación de las doce medidas para el desarrollo del mercado único europeo, la propuesta de la Comisión pretende aprovechar este potencial de las empresas sociales para la creación de riqueza de forma sostenible mejorando su acceso a la financiación.