Intel define a los microprocesadores libres conflicto a aquellos que son abricados con metales procedentes de fundiciones que han sido validados por el Programa de Evaluación de la Fundición libre de  conflictos del EICC-GeSI.

Intel define a los microprocesadores libres conflicto a aquellos que son abricados con metales procedentes de fundiciones que han sido validados por el Programa de Evaluación de la Fundición libre de  conflictos del EICC-GeSI.

El oro, el estaño, el tungsteno y el tántalo que proceden de la República Democrática del Congo (RDC) son considerados minerales en conflicto debido a que en su extracción se vulneran derechos humanos y son utilizados para financiar grupos violentos.

"La República Democrática del Congo cuenta con fuerzas rebeldes que están operando en la parte oriental, y que no están bajo control del gobierno. Extorsionan a la población a través de mecanismos tales como la violación o los impuestos ilegales para controlar la minería ", explicó Bob Leet, líder de Intel en la industria de los minerales de conflicto y el co-director del Programa del EICC –GeSI.

EE.UU. cuenta con la ley comúnmente conocida como Ley Dodd-Frank que contiene una sección sobre los minerales en conflicto y presiona a las empresas a desarrollar estrategias para asegurar minerales libres de conflicto.

Intel viene trabajando con anterioridad en estos temas. En el Informe de sustentabilidad 2011 de Intel se afirma que la compañía ha trabajado en lograr una cadena de suministro libre de conflictos desde 2009, cuando pidió a sus proveedores completar un estudio sobre el origen de los minerales en sus cadenas de suministro.

En 2010 envío a sus representantes a la República Democrática del Congo para realizar un diágnostico de la situación y evaluar posibles medidas. A finales de 2011, Intel afirma que ha logrado trazar el 92 por ciento del tantalio, estaño, tungsteno, oro, que se utilize en sus líneas de suministro.

Es importante resaltar que Intel no está de acuerdo con la prohibición total de los recursos de la República Democrática del Congo ya que se estaría privando a la población local de una de sus principales fuentes de sustento. 

En general, la industria de la electrónica ha tomado una postura fuerte contra los minerales en conflicto y el riesgo de apoyar a grupos rebeldes. Sin embargo, a diferencia de Intel, muchas empresas no analizan a fondo cómo su manejo de la situación podría afectar las vidas de las personas en la República Democrática del Congo. Ellos decidieron simplemente evitar el material de la región, que esencialmente creó un embargo que puso a miles de personas sin trabajo.

Se están realizando esfuerzos para revertir esta situación como el Programa Piloto Soluciones para la Esperanza (SFH) anunciado en 2011, cuyo objetivo es conseguir fuentes libres de conflictos en la RDC y utilizar el etiquetado para informar que son productos hechos con minerales libres de conflicto.

La pregunta clave en esta cuestión es si hay suficiente tántalio libre de conflictos para suplir toda la producción. Si bien se cree que el mercado está cubierto, algunos especialistas consideran que si los proyectos actualmente en funcionamiento avanzan a la plena producción no habrá suficiente mineral libre de conflicto para sostenerlo. 

Además, dadas las características privilegiadas de la minería en la República Democrática del Congo, es poco realista creer que estos recursos puedan ser ignorados.

Sin embargo, si las compañías no pueden posicionarse adecuadamente en este tema se corre el riesgo de consecuencias importantes para su reputación y su resultado final.Muchas empresas se oponen a la Ley Dodd-Frank  diciendo que es demasiado difícil y costoso realizar un seguimiento del consumo de metal a lo largo de la cadena de suministro. La iniciativa de Intel proporcionaría una oportunidad de aprendizaje.