La Asamblea General de Naciones Unidas adoptó esta resolución para reafirmar su determinación de hacer que la “Energía Sostenible para Todos” sea una realidad. El texto solicita a los Estados miembros impulsar los esfuerzos para que el acceso universal a los servicios de energía sostenible sea tomado como una prioridad. 

Señala que cerca de 1,3 millones de personas carecen de electricidad y que 2,6 millones de personas en los países en desarrollo dependen de la biomasa tradicional para cocinar y calefaccionarse.  

El texto expresa su preocupación por el hecho de que, incluso cuando se dispone de servicios de energía, millones de personas pobres no pueden pagar por ellos.

La resolución destaca la necesidad de mejorar el acceso a servicios energéticos confiables, económicamente viables, socialmente aceptables y ecológicamente racionales. Para tal efecto, se propone mejorar la eficiencia energética, el aumento de la cuota de las energías renovables y tecnologías más limpias y eficientes.

Cabe destacar que con esta resolución se reconoce la importancia de trabajar en las cuestiones energéticas durante la elaboración de la agenda de desarrollo post-2015. La Asamblea pidió a los gobiernos, así como a las organizaciones internacionales y regionales y otras partes interesadas, combinar, como sea apropiado, el aumento del uso de fuentes de energía renovables, un uso más eficiente de la energía, aumentar la apuesta por las tecnologías energéticas avanzadas, incluidas las tecnologías libres de combustibles fósiles, y el uso sostenible de recursos energéticos tradicionales, para satisfacer la creciente necesidad de servicios energéticos.

La declaración del Decenio se basa en el creciente interés de los Estados miembros en materia de energía. La resolución 65/151 designó al 2012 como el "Año Internacional de la Energía Sostenible para Todos" y pidió al Secretario General que organice y coordine las actividades realizadas durante el año para crear más conciencia sobre la importancia de abordar las cuestiones energéticas.

En respuesta, el Secretario General puso en marcha la Iniciativa “Energía Sostenible para Todos”, que reúne a las partes interesadas del Gobierno, el sector privado y la sociedad civil para movilizar la acción hacia tres objetivos: proporcionar acceso universal a la energía, duplicar la tasa de mejora de la eficiencia energética y duplicar la cuota de las energías renovables en el mix energético global.

En septiembre, el Secretario General anunció que Kandeh Yumkella, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) y Presidente de ONU-Energía, servirán como Representante Especial para la Iniciativa y como Consejero Delegado respectivamente. 

"La Energía sostenible es esencial para la consecución de nuestros objetivos de desarrollo del Milenio y para la apertura de nuevas oportunidades para el crecimiento y la prosperidad de todos los países del mundo", dijo Yumkella. "También es central en los debates sobre el programa de desarrollo post-2015 y las propuestas para nuevas metas de desarrollo sostenible", y continuó, "Damos una calurosa bienvenida a la declaración de la Asamblea General del Decenio y estamos dispuestos a ayudar a los Estados Miembros ya todas las partes interesadas en hacer de la energía sostenible para todos una realidad".