El documento busca ser una hoja de ruta para la gestión pública en materia de responsabilidad social, y detalla los objetivos y acciones prioritarias para el desarrollo de una política nacional en la materia, identificando las principales deficiencias y estableciendo cuatro ejes de acción para superarlas: estrategia, proyección internacional, difusión y diálogo. En este contexto se plantea la necesidad de diseñar una estrategia de desarrollo sostenible desde el Estado, creando mayor conciencia sobre la Responsabilidad Social en Chile y dando a conocer sus lineamientos, con el fin de promover un debate informado sobre sus características distintivas y ventajas.Igualmente importante sería fomentar un diálogo social constructivo e inclusivo entre el Estado y las partes interesadas, con el fin de contar con un consenso en la toma de decisiones.

De acuerdo a fuentes del consejo, la estrategia quiere incorporar la sostenibilidad como parte de la imagen país, a partir de un “relato” que destaque los progresos que se realice en esta materia.Para superar cada una de estas brechas, este Plan propone acciones concretas de corto y largo plazo como incentivar las buenas prácticas, a través de mecanismos de reconocimiento público como el programa Sello Pro Pyme -que distingue a las empresas que pagan en menos de 30 días a sus pequeños proveedores- o la elaboración de reportes de sostenibilidad por parte de las empresas tanto públicas como privadas.

El Consejo fue creado en julio de 2013, en una iniciativa pionera en América Latina, con el objeto de asesorar al Ministro de Economía en la elaboración de las políticas públicas relacionadas con la Responsabilidad Social para el Desarrollo Sostenible del país, y ha sido mirado con interés desde todo el mundo, ya que por primera vez el Estado asume un rol protagónico en esta materia.