El mayor Fondo de Pensiones de Noruega se desprende de inversiones en carbón
El Fondo Global de Pensiones Noruego (GPFG), el mayor del mundo en su género, se desprendió de sus inversiones en compañías de carbón y petróleo motivado por los riesgos que generan los cambios en las regulaciones ambientales, según informaron sus portavoces.
El Fondo que gestiona 752.000 millones de euros procedentes de los enormes ingresos petroleros y gasísticos de Noruega ha retirado sus inversiones en 114 empresas cuyas actividades comerciales involucran a los combustibles fósiles como el carbón y el gas.
Las inversiones de 53 compañías de carbón y 16 empresas de petróleo incluyendo Peabody Energy, Arch Coal, Alpha Natural Resources y Coal India, fueron vendidas a principios de marzo de 2015. A todas ellas se les retiró la inversión a causa de sus elevados niveles de emisiones, según anunció a través de su Primer Informe sobre Inversión Responsable.
El fondo estatal noruego, conocido popularmente en el país como Oljefondet (el fondo del petróleo), fue creado en 1990 y desde entonces se ha convertido en un gigante financiero cuya cartera controla más del 1% de los mercados bursátiles globales. Noruega es el catorceavo mayor productor de petróleo pero su producción descendió a 1,46 millones de barriles diarios en 2013, gravados con un 78% de impuestos estatales sobre los beneficios.
El portavoz del Fondo, Marthe Skaar, admitió que la decisión de retirar las inversiones viene motivada, más que por consideraciones puramente ecológicas, por el hecho de que el futuro de estas empresas altamente contaminantes “está en riesgo ante la posibilidad de cambios en las regulaciones ambientales u otros”. Desde Greenpeace Noruega cuestionan los motivos de la empresa por su caracter reactivo y no proactivo.
En 2014, el mayor fondo privado de pensiones del país escandinavo, KLP, anunció que dejaba de invertir en 27 empresas relacionadas con la minería de carbón atendiendo al llamamiento del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC, en sus siglas en inglés) de la ONU y el Banco Mundial a la desinversión en combustibles fósiles.
"Es una vergüenza que los mayores fondos de pensiones privadas de Noruega esten mucho más dispuestos a tomar medidas responsables sobre el cambio climático y que el fondo soberano de Noruega no lo haga", dijo Truls Gulowsen de Greenpeace Noruega, en aquel momento. La organización ambientalista ve con buenos ojos la desición última del Fondo y vaticinan la muerte del carbón.