El estudio se basa en una encuesta a 205 empresas latinoamericanas, la mayoría de industrias manufactureras, comercio y agricultura.

Se buscó entender el “Rol social del empresariado” y se descubrió lo siguiente:

La mayoría de los encuestados considera que el punto de partida es la creación de empleo decente y la promoción del desarrollo local por medio de encadenamientos productivos.

El cumplimiento legal se percibe como condición necesaria (no suficiente) para liderar y promover una toma de conciencia social.

Además, las empresas consideran que es necesario “Hacerse cargo” de los impactos negativos (reales y potenciales) y por ello se involucran en temas sociales.

La co-generación de valores económico y social en asociación con instituciones públicas y organizaciones privadas es otro de los motivos mencionados.

El estudio también encontró que si bien la práctica de realizar inversión social ha incrementado a lo largo de los años, aún no es una práctica generalizada en la región. Además esta práctica todavía se da de manera desordenada y, en muchos casos, de forma asistencialista y poco estratégica. “Aún persiste mucho la práctica de filantropía reactiva”, menciona el estudio.

Factores que promueven la inversión social en la región:

a) transferencia de políticas corporativas de RSE desde las casas matriz,

b) creciente diálogo entre entes públicos y el sector privado y

 c) mayor difusión de buenas prácticas de RSE en la región.

Los principales temas de inversión social son:

1. Educación (81%)
2. Medio Ambiente (67%)
3. Salud (57%)
4. Empleo y empleabilidad (49%)
5. Desarrollo económico de la comunidad (36%)

Destinatarios

Las comunidades de impacto directo de las empresas constituyen la principal población meta de las inversiones sociales. Niñez, personas en condición de pobreza, juventud y adolescencia son las poblaciones que siguen.

Recursos invertidos

En la mayoría de los casos las empresas invierten recursos económicos. En muchos casos, los recursos económicos son acompañados por horas de colaboradores y colaboradoras en forma de voluntariado operativo y/o profesional.

Seguimiento y evaluación

Las empresas brindan seguimiento a los proyectos por medio de informes, avances, planes de trabajo o finalización de las inversiones cuando se trata de proyectos de infraestructura.

Sin embargo, en el tema de evaluación de los impactos de los proyectos las empresas aún no saben cómo manejar el tema. En el mejor de los casos, las empresas cuentan con indicadores de resultados para cada proyecto de inversión social.