"La decisión de Ledesma de validar las emisiones de Gases de Efecto Invernadero de su papel de oficina es un ejemplo importante para la industria de producción de papel de la región, y establece un punto de referencia para nuevas reducciones en las emisiones de gases de efecto invernadero de la producción de papel", dijo Jaime de Monasterio, Director Regional de SCS para América latina.

SCS realizó una evaluación de la Huella de Carbono (CF) para el papel Resma de Oficina de Ledesma en base a los requisitos del Protocolo de GEI de la IRG e ISO 14064-3. El producto, papel de oficina para consumidores en Argentina, se fabrica a partir de pulpa de bagazo blanqueada (~ 92%) y pulpa de madera blanda (~ 8%). La verificación consideró las emisiones de gases de efecto invernadero "desde la cuna hasta la tumba", desde la extracción de materia prima hasta la producción, transporte, uso y reciclaje o eliminación.

El bagazo, el residuo de la fibra de la caña del azúcar, proviene de las operaciones del ingenio azucarero de Ledesma. La compañía opera el mayor ingenio azucarero de Argentina, que produce azúcar refinada, jarabes de maíz, alcoholes etílicos y otros productos de azúcar.

Por su pulpa de madera blanda, Ledesma está certificada bajo el programa de cadena de custodia del Forest Stewardship Council (FSC). "Hemos sido certificados FSC por SCS desde 2014", dijo Marcos Uribelarrea, Director de Negocios de Papel en Ledesma. “Nuestra política de obtener materiales certificados por el FSC y utilizar nuestros propios productos de desecho en la producción de papel no solo cumple con nuestros valores de sostenibilidad, sino que también ayuda a nuestros resultados. A través del uso de estas fuentes, estamos demostrando nuestro compromiso de servir a nuestros clientes a largo plazo".

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