CDP indica que la industria del cemento debe duplicar esfuerzos para cumplir el Acuerdo de París
Un nuevo informe de CDP analiza 13 de las empresas cementeras más grandes del mundo y destaca que necesitan con urgencia duplicar sus reducciones de emisiones o arriesgarse a perder los objetivos climáticos. Además presenta un ranking que presenta a Dalmia Bharat, Ambuja Cement y Cementos Argos como las mejores compañías en métricas relacionadas con el clima, con Taiheiyo Cement, Cementir Holding y Asia Cement Corporation en el ranking más bajo.
El cemento es el segundo sector industrial más contaminante y se utiliza en el concreto, que después del agua es el producto más consumido en el mundo. El sector del cemento en sí representa el 6% de las emisiones globales de CO2.
El nuevo informe de CDP sostiene que se requiere una innovación significativa en tecnología para reducir las emisiones de carbono del cemento.
En los últimos años, CEMEX informó haber evitado la emisión de más de 7 millones de toneladas de dióxido de carbono al medio ambiente, respecto a la línea base de 1990. Esto equivale a las emisiones de carbono que 1.3 millones de vehículos de pasajeros emiten en promedio al año. Asimismo, el año pasado, Cemex aumentó 49% la tasa de sustitución de combustibles fósiles en la producción de cemento en México.
Por su parte, Lafarge Holcim informó tener el objetivo para 2030 de producir con un 40% menos de CO2 neto por tonelada de cemento que en 1990. Además, se comprometió a ayudar a sus clientes a evitar 10 millones de toneladas de CO2 liberadas cada año desde sus edificios e infraestructura mediante el uso de soluciones innovadoras. La empresa informa haber logrado una reducción del 24% en las emisiones netas específicas de CO2 por tonelada de cemento desde 1990.
Pero según CDP, son las empresas indias quienes más esfuerzos realizan y se benefician de las plantas de cemento más nuevas y más eficientes impulsadas por el alto crecimiento del mercado en la región, en contraste con sus pares europeos que dependen de las plantas de cemento más antiguas.
Paul Simpson, CEO de CDP comentó: "El cemento es un contaminador pesado y en gran parte invisible, pero se da por sentado como un componente esencial de la civilización básica. Con la presión potencial proveniente de múltiples fuentes, incluida la cadena de valor en la forma de la construcción y la regulación de la ciudad, las compañías de cemento necesitan invertir e innovar para evitar riesgos inminentes para sus operaciones y el mundo en general. Esto puede parecer desafiante al principio, pero cada año se retrasa, el costo se vuelve mayor, por lo que los equipos de gestión, los reguladores y los inversionistas deben pensar a largo plazo. Hay una solución: las compañías cementeras solo necesitan invertir adecuadamente para encontrarla".
El informe de CDP también destaca otros posibles riesgos y oportunidades para el sector:
La captura y almacenamiento de carbono (CCS) es una tecnología importante para la creación de cemento con bajo contenido de carbono, sin embargo, los proyectos de CCS aún se encuentran en gran parte en la fase piloto del sector. Heidelberg muestra cierta inversión en CCS a través de varias tecnologías, pero de lo contrario el progreso es limitado.
Los jugadores europeos se benefician de combustibles alternativos provenientes de la recolección organizada de residuos, que se convierte en la fuente de combustible para la producción de cemento. Los productores de mercados emergentes están atrasados en esto, debido a la infraestructura limitada.
Cinco compañías no usan un precio interno de carbono, que es un riesgo significativo en un sector donde la legislación de fijación de precios del carbono podría tener un impacto importante.
La regulación del carbono, como el Esquema de Comercio de Emisiones de la UE, es el mecanismo clave para regular las emisiones del sector en Europa. Sin embargo, las cuestiones estructurales y el cabildeo de las autoridades económicas han socavado el potencial de cambio para el sector.
Las compañías de cemento no están incentivando la gestión del riesgo climático a largo plazo a través de la remuneración del nivel ejecutivo, y solo Cementos Argos lo incluye.
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