Desde el inicio de la crisis de los refugiados, en octubre de 2015, políticos, empresarios y asociaciones han insistido en la importancia de ingresar a inmigrantes al mercado laboral. El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha hablado hasta de emplear a refugiados por menos del salario mínimo, con miras a facilitarles la búsqueda de empleo.

Compañías como Adidas, Opel, Lufthansa, Deutsche Bank, Siemens, Volkswagen o Bosch, han adoptado el compromiso de participar en la iniciativa “wir-zusammen.de” y, a su vez, establecer iniciativas propias, como programas de mentores y pasantías.

Antes de esta iniciativa, Daimler y la Deutsche Bahn habían anunciado que harían su aporte para que los refugiados ingresen al mercado laboral. El pasado noviembre, 40 solicitantes de asilo empezaron sus pasantías en Daimler. Cientos más empezarían este año, aseguró el grupo empresario. Estas pasantías no conducen a verdaderos trabajos, pero sí les ofrece la posibilidad a los refugiados que participaron de postularse después como aprendices.

La Deutsche Bahn no quiere solamente brindar pasantías a los refugiados con experiencia laboral, sino también formarlos en trabajados especializados. Según el portal alemán Spiegel online, ambas compañías reportan grandes obstáculos burocráticos para conseguir los permisos legales, sobre todo el permiso de residencia y trabajo.

“La coordinación con la Oficina Federal de Empleo, y otras autoridades, ha tomado varios meses”, dijo un portavoz de la Deutsche Bahn al portal de noticias.

Si se le pregunta a la Oficina Federal de Empleo (BA, por sus siglas en alemán) por las cifras de refugiados en condiciones de entrar el mercado laboral, no se consigue respuesta alguna. Y es que hasta el otoño de 2015 no existía motivo alguno para la BA de “incluir en la base de datos si la persona tiene estatus de refugiado”, dijo a DW la portavoz de esa oficina, Susanne Eikmeier. “Para mis colegas en la agencia no existía la posibilidad de oprimir algún botón que registrase a la persona como refugiada”, agrega.

Desde finales del año pasado, la BA ha empezado a cambiar su sistema en las computadoras. Ahora es posible registrar quién es refugiado, pero, debido al gran número de personas que llegan, registran un gran retraso. “Este proceso durará un par de meses”, asegura Eikmeier. “Yo creo que en el verano tendremos estadísticas, basadas en datos confiables, sobre refugiados y solicitantes de asilo”, concluye.

El proyecto de estas 36 empresas se puede conocer en http://www.wir-zusammen.de. El sitio web está diseñado para fomentar la transparencia y proporcionar orientación a los refugiados. Pero por encima de todo ofrece ejemplos prácticos para motivar a otras empresas a contribuir activamente a la integración de los refugiados.

El Grupo ThyssenKrupp, impulsor de la iniciativa está contribuyendo con su programa "ayudamos". Durante los próximos dos años, el Grupo creará un adicional de 150 plazas de aprendizaje, 230 pasantías y puestos de trabajo más cualificados para los refugiados en diversas empresas del Grupo en Alemania.

"Los empleos dan la oportunidad de construir una vida mejor en Alemania. Así, de acuerdo con la filosofía del Grupo redefinimos nuestro programa "ayudamos" en términos concretos como una iniciativa a largo plazo para ayudar a integrar a los refugiados en la sociedad y en el mercado de trabajo", dijo el CEO de ThyssenKrupp, el Dr. Heinrich Hiesinger. Alrededor de 50 refugiados tienen ahora contratos con ThyssenKrupp y /o ya han empezado a trabajar.