Jack Poulson trabajó como investigador científico senior para Google hasta su renuncia del 31 de agosto de 2018 por estar en contra del proyecto de Google para desarrollar un motor de búsqueda censurado en China que causó un escándalo en la compañía.

Él no quería participar en una empresa que censuraría la información a petición de los funcionarios comunistas chinos, simplemente para regresar al mercado chino. Ahora, quiere asegurarse de que otros trabajadores de la tecnología puedan luchar por lo que es correcto sin tener que poner carrera en juego.

Poulson ha lanzado Tech Inquiry, una organización sin fines de lucro que tiene como objetivo hacer que sea más fácil para los programadores con conciencia hablar dentro de sus empresas cuando sienten que se están cruzando los límites éticos. Poulson está presionando por una mayor transparencia para evitar que los trabajadores simplemente sean engañados para hacer un trabajo que nunca asumirían de manera voluntaria.

"Creo que los trabajadores de la tecnología necesitan un consentimiento informado sobre cuándo su trabajo puede llevar a la pérdida de vidas o la supresión de los derechos humanos o las libertades", dijo Poulson al TheGuardian durante el Open Rights Group sobre datos y democracia. 

El objetivo de Tech Inquiry es aprovechar la creciente ola de descontento de los empleados que se ha extendido por todo Silicon Valley, y brindarles a los trabajadores las herramientas que necesitan para enfrentar a sus jefes. La propia postura de Poulson contra el Proyecto Dragonfly, el esfuerzo de Google por construir un motor de búsqueda censurado para volver a ingresar al mercado chino, es solo un ejemplo de ese movimiento. También cita el rechazo dentro de Google contra el Proyecto Maven, un proyecto del Pentágono  que la compañía firmó en abril de 2017, así como los movimientos en otras compañías, incluyendo Microsoft, Amazon e Intel.

Poulson quiere extender ese poder a los trabajadores en las fases de diseño y desarrollo de la industria, donde el trabajo a menudo se lleva a cabo en el mayor secreto y el trabajador tiene la menor capacidad de generar un alboroto si se mueve en una dirección peligrosa o alarmante.. "Internamente, y especialmente en un departamento de investigación como el que estaba, hay una sensación de que tienes un pase libre. Cuando haces I+D, existe la idea de que puedes hacer lo que quieras total el equipo de privacidad lo arreglará más tarde".

Poulson argumenta que permitir esta libertad ética a los "experimentos" es peligroso. Por un lado, para cuando un proyecto está a punto de completarse, "ha creado un equipo completo cuya inversión en toda su carrera es lanzar esto". Y, además, ha normalizado el comportamiento a un grupo de ingenieros”.

Más información en este link.