“Ser circular es una de nuestras grandes ambiciones y desafíos para el futuro. Es un cambio transformador para todo nuestro negocio. Nuestro objetivo es dar a los productos y materiales una vida más larga a través de la reutilización, la restauración, la remanufactura y, como última opción, el reciclaje. Creemos que esto requiere liderazgo y colaboración. Estamos muy contentos de trabajar con la Fundación Ellen MacArthur para avanzar en nuestra propia transición y hacer de la economía circular una parte central de la industria del mobiliario para el hogar. Uno de nuestros primeros proyectos juntos será desarrollar un diccionario común global sobre economía circular que pueda apoyar una transición en toda la industria”, dice Lena Pripp-Kovac, directora de sostenibilidad del Grupo Inter IKEA.

Ya hoy, IKEA ha progresado para convertirse en un negocio circular; Las primeras pruebas de renovación tuvieron lugar en el año fiscal 19. Los sofás fueron renovados y revendidos, proporcionando conocimiento para el potencial de escalamiento futuro. IKEA también está explorando servicios que permiten a los clientes adquirir, cuidar y transmitir productos de forma circular. IKEA ha desarrollado principios de diseño de productos circulares para el desarrollo de todos los productos, con la ambición de usar solo materiales renovables y reciclados para 2030. Hoy, más del 60% de la gama de productos IKEA se basa en materiales renovables, como madera y algodón, y más del 10% contiene materiales reciclados. A fines del año fiscal 19, la participación general del poliéster en los productos textiles que se reciclan alcanzó el 59%. El material rPET se usa en productos que incluyen alfombras, cortinas, persianas enrollables, ropa de cama, almohadas, edredones, fundas de sofá, así como cajas y bolsas de almacenamiento.

“La economía circular permite a las empresas repensar cómo crean valor, de manera que beneficien al medio ambiente, la sociedad y la economía. Esta es una oportunidad emocionante para ayudar a transformar una industria que no solo es una parte importante de la economía global, sino que tiene una conexión tan fuerte y personal con los individuos y las comunidades de todo el mundo", dijo Andrew Morlet, CEO de la Fundación Ellen MacArthur.

A través de esta asociación, IKEA y la Fundación Ellen MacArthur serán:

• Desarrollar definiciones globales que son clave para permitir una economía circular basada en hechos, transparente y fácil de entender y de seguimiento.
• Abogar por el diseño circular e inspirar a una nueva generación de diseñadores.
• Impactar en la legislación para acelerar la transición a una economía circular
• Promover ofertas circulares a nuestros clientes e inspirar nuevos comportamientos.