“La pandemia ha creado un enorme problema social y económico para los recicladores urbanos”
Entrevista a Cristian Rojas, presidente de AEPA Chile, y con Atilio Savino, presidente del capítulo regional de ISWA, asociación dedicada a promover y desarrollar la gestión profesional de residuos, sobre el impacto del COVID-19 en la industria del reciclaje y la recolección de residuos en América Latina.
A principios del año pasado, la organización “International Solid Waste Association (ISWA)”, con sede en Rotterdam - Holanda y dedicada a promover y desarrollar la gestión profesional de residuos, inició la creación de los capítulos regionales, el primero en América Latina y el Caribe.
El 11 de abril de 2019 fue celebrada la primera reunión de la red Latinoamericana de ISWA, encabezadas por Atilio Savino, ex secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable de Argentina, quien asumió la presidencia de la asociación, convirtiéndose en el primer representante de un país en desarrollo al frente de esta red.
En esta reunión inaugural se resolvió crear el Consejo directivo del Capítulo Regional, integrado por Cristian Rojas, presidente de AEPA Chile; Carlos Silva, presidente de Abrelpe, Brasil; Luis Horta, presidente de CEGRU, Uruguay; y Marcelo Rosso, presidente de ARS, Argentina. La aprobación del capítulo regional se formalizó en octubre pasado.
Según su opinión, ¿Cuáles son los mayores impactos del COVID-19 en la industria del reciclaje?
Cristian Rojas: “Los impactos del COVID-19 son tanto negativos como positivo. En primer lugar, es claro el impacto negativo socioeconómico ya que al reducirse la actividad económica y aumentar las medidas de prevención impuestas por las autoridades, se reduce y afecta la actividad sanitaria y ambiental de gestión y valorización de residuos que es muy necesaria para la sostenibilidad de todos. Es un hecho que esta crisis sanitaria impacta de forma directa en la reducción de ingresos de todas las personas y empresas que están vinculadas de forma directa a la actividad de gestión, recolección, transporte, tratamiento, reciclaje y valorización de residuos, lo cual no es menor, porque es una actividad que genera muchos empleos.
Pero también, se debe considerar el impacto positivo lo cual está relacionado con el aspecto sociocultural evolutivo, ya que en este periodo de pandemia se ha tenido el tiempo para reflexionar y tomar conciencia de la importancia de valorar y apreciar las cosas más simples de la vida. Estamos en un momento de mayor umbral de sensibilidad y conciencia, nos hemos dado cuenta de la importancia de la sostenibilidad, y de la necesidad del componente sanitario tanto en el trabajo que realizan los funcionarios del Estado que cuidan la salud de las personas, como los funcionarios sanitarios/ ambientales que cuidan la salud de las personas y el medio ambiente, recicladores y valorizadores, etc.
Hoy todos debemos comprender e internalizar que si no tenemos un ambiente libre de contaminación, es imposible reducir el costo social de la salud y mejorar la calidad de vida de las personas. La salud de las personas y la salud del medioambiente tienen el mismo nivel de importancia.
Todo lo anterior da un pulso e impulso a elevar los estándares sanitarios y ambientales en todos los países del mundo, además de generar el contexto y condición para el nacimiento de la nueva etapa de sostenibilidad donde existirán nuevos indicadores que estarán en base a la contabilidad ambiental, finanzas climáticas y enmarcadas en los objetivos de desarrollo sostenible”.
Atilio Savino: “Como consecuencia de la pandemia, la recolección de materiales reciclables se interrumpió en toda la región y se suspendieron todas las actividades de los recicladores urbanos (formales o informales). La Pandemia ha creado un enorme problema social y económico para los recicladores urbanos, por la falta de ingresos de este sector y el colapso de los mercados de reciclables”.
¿Cuáles son los desafíos que debe superar América Latina en los próximos años?
Cristian Rojas: “Los desafíos que debe superar América Latina es lograr mejorar el nivel de educación sanitaria y ambiental en todos los ciudadanos de las naciones que conforman este continente, solo así se tomara conciencia de la importancia que tiene el componente ambiental y que debe estar equilibrada con el componente económico y regulatorio.
Los gobiernos deben dirigir sus esfuerzos a educar y a lograr acuerdos y establecer las bases para sumar voluntades, solo así se lograra promover el nuevo concepto de sostenibilidad. La educación debe resaltar que es insostenible mantener la ecuación de maximizar el beneficio a toda costa, sino que, lo importante es sustentar o sostener el beneficio para así lograr cuidar y preservar los recursos naturales de una nación y con ese concepto se podrá garantizar prosperidad a nuestras futuras generaciones. En base a lo anterior es muy importante que el cuidado de la salud de las personas y el cuidado del medio ambiente sea prioridad de un gobierno, nación y estado.
Atilio Savino: “Uno de los mayores desafíos de la región es otorgar a la gestión integral de residuos sólidos la debida prioridad política. Falta mucho por avanzar en la reducción y cierre de vertederos o basurales a cielo abierto y en el alcance territorial de la gestión integral de residuos para mejorar su alcance porque hoy no llega a todos. Por otro lado, se necesita mejorar la separación de residuos en origen, en especial la recolección diferenciada de los residuos orgánicos (50% del total) y su eficaz tratamiento. Esto ayudará a reducir los costos de operación de reciclaje y aumenta la eficiencia, acelerar e incentivar la correcta implementación de la económica circular enfocada en la sustentabilidad
También es clave reforzar la gobernanza del sector a través de un mejoramiento del funcionamiento institucional y avanzar en la formalización y el reconocimiento de los recuperadores urbanos, los más vulnerables del sector”.
¿Cómo evalúa el avance de la legislación a nivel regional?
Cristian Rojas: “Necesitamos generar los marcos regulatorios para el diseño e implementación de una actividad económica y social donde se incorpore la contabilidad ambiental y finanzas climáticas; que fomente y mejore la competitividad en el tratamiento, reciclaje y destino final de los residuos. En estos momentos toma especial énfasis los residuos generados en centros de atención primaria donde se debe mejorar el registro de datos respecto a la trazabilidad y sistemas de monitoreos. También es importante regular, estandarizar y fiscalizar la exportación e importación de residuos peligrosos y no peligrosos que es un problema que se está comenzando a afectar a los gobiernos de otros países y continentes”.
Atilio Savino: “No es la falta de legislación el problema. El problema es su deficiente implementación. Sería apropiado avanzar legislativa e institucionalmente en la explicitación del concepto de la economía circular y en la implementación del principio de responsabilidad extendida del productor.”
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