Mastellone Hnos. participa del programa nacional para evitar el desperdicio de alimentos

03.08.2017 | Alimentos

La compañía se suma al Programa Nacional de Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos, creado por el Ministerio de Agroindustria de la Nación, con el objetivo de llegar a los consumidores y concientizar sobre la problemática del desperdicio de alimentos.


Se estima que en Argentina se desperdicia más de un kilo de alimentos por día por persona. Por esta razón, Mastellone Hnos., se une al Programa Nacional de Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos de Argentina, con el objetivo de contribuir a la atención y concientización de esta problemática.

En este contexto, la compañía dará soporte a la campaña con consejos en sus redes sociales sobre la incorporación de hábitos y tips para aprovechar al máximo todos los alimentos y reducir su desperdicio bajo el #ValoremosLosAlimentos.

Según el estudio “Pérdida y desperdicio de alimentos en el mundo” de la FAO, cada año, 1.300 millones de toneladas de alimentos son desechados, es decir que nunca llegan a ser consumidos. A esto se le suman los recursos utilizados en vano para su producción que impactan en el ambiente (agua, suelo, energía, mano de obra, combustible, dinero, entre otros) y se reduce la posibilidad de que esos alimentos, que no se consuman, puedan ser aprovechados por personas que los necesitan.

“Como una de las empresas líderes en el mercado de alimentos, es nuestro deber apoyar e impulsar este tipo de programas. Estamos convencidos de que el compromiso y trabajo en red tanto del sector público como privado, contribuirá a reducir esta problemática significativamente”, sostuvo Alejandro Castelli, Gerente de Relaciones Institucionales y Comunicaciones.

El “Programa Nacional de Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos” se creó mediante la Resolución Ministerial N° 392/2015 con el objetivo central de coordinar, proponer e implementar políticas públicas, en consenso y con la participación de representantes del sector público y privado, sociedad civil y organismos internacionales, que atiendan las causas y los efectos de la pérdida y el desperdicio de alimentos.

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