Los consumidores tienen cada vez mayores exigencias con las marcas que eligen. La sustentabilidad toma día a día más protagonismo en las decisiones de compra y preferencias de marca. Según un estudio de IBM junto a Federación Nacional de Retailers (NRF), la asociación de comercio minorista más grande del mundo, la mitad de los encuestados están dispuestos a pagar un precio extra por la sostenibilidad y el 62% cambiaría sus hábitos de compra en pos de reducir el impacto ambiental. Ser sustentables ya no es una alternativa, sino un pilar obligatorio en la construcción y diferenciación de la empresa. En este proceso de tendencias sostenibles, la tecnología se inserta como una herramienta fundamental para alcanzar los objetivos y cumplir con las expectativas.

La importancia de la sostenibilidad no pasa desapercibida para los líderes de la región. El estudio anual de IBM que encuesta a más de 3000 CEOs en todo el mundo - incluyendo Argentina - demostró que la mitad de los encuestados en Latinoamérica considera la sostenibilidad como una prioridad para sus organizaciones. Sin embargo, el mismo porcentaje identifica a la sostenibilidad como uno de los mayores desafíos en los próximos años. La alianza entre tecnología y sustentabilidad se posiciona como un eslabón central para hacer frente a las incertidumbres, cambios y barreras, logrando una ventaja competitiva ante las oportunidades y desafíos del contexto.

La tecnología puede ser la clave para optimizar procesos, tener un trabajo de la información más eficiente, alcanzar un perfil colaborativo, y diferenciar a la empresa con soluciones innovadoras y actualizadas. De esta manera, se puede lograr un impacto positivo tanto para los resultados financieros como para la transformación empresarial; lo cual conduce a destacarse en las preferencias de marca de los consumidores. Por ejemplo, la Inteligencia Artificial (IA) o la tecnología de automatización funcionan como recursos estratégicos para las iniciativas de sostenibilidad de las organizaciones. Desafíos como la obtención de datos precisos, la eficiencia de las operaciones, las brechas de habilidades o la transparencia de los procesos de abastecimiento y trabajo, pueden ser resueltos a través del manejo de estas tecnologías.

Ya no es solo el producto o servicio lo que importa, también se debe cuidar el origen y condiciones de producción. El cliente se interesa por conocer esta información, así como busca saber cómo las marcas equilibran el impacto negativo de su producción. La tecnología puede facilitar la auditoría de procesos y el acceso a los datos, ayudando a la credibilidad de la marca.

No aprovechar los recursos tecnológicos sería perder una oportunidad. Desde IBM trabajamos para ser el socio de las empresas en ese viaje de derribar las barreras que impiden que aceleren o pongan en práctica sus estrategias de sostenibilidad. Y más que eso, de analizar, monitorear y probar su progreso. Hay que tener en cuenta que no basta con mostrarse sostenibles. Hay que serlo realmente y tener métricas claras y transparentes para el cliente.

El 44% de los consumidores toma decisiones de compra basadas en los propósitos de las marcas, buscan corporaciones con compromisos y valores con los cuales el usuario pueda identificarse. El consumidor busca cualidades de valor humano en las empresas. Dentro de la dominante tendencia de plataformas digitales, la tecnología puede ayudar a cuidar el acercamiento al cliente, mejorar la calidad de la atención con la comunicación humana y ayudar a transmitir la esencia de la marca. De esta manera se enriquece la experiencia del consumidor. También es importante conectar las plataformas físicas y digitales para brindar una oferta adecuada y tener una comunicación de marca eficiente.

Los consumidores de hoy tienen un propósito, y es lograr que las marcas también tengan uno. La sustentabilidad se ha posicionado como una prioridad, las empresas de nuestra era tienen la clave para responder a este imperativo. Los líderes ya son conscientes del rol central de la sustentabilidad y los clientes y colaboradores ya están presionando en su favor; es momento de que todas las corporaciones trabajen en tener clara una estrategia de sostenibilidad alineada con sus negocios así como los asociados correctos para ayudarlos a crear ese viaje con objetivos claros y logrables.