El 72,33% de los accionistas de McDonalds votó en contra de una propuesta sobre obesidad infantil

03.06.2011 | Mundo

Esta semana se hicieron públicos los resultados de la votación de la última Asamblea Anual de Accionistas de McDonalds. Un grupo de accionistas impulsados por el fondo inversor minoritario The Sisters of St. Francis of Philadelphia había presentado una Proposición para que la empresa, en el marco de sus responsabilidad social empresaria (RSE), realice un estudio amplio que se centre en la influencia de la comida rápida en la epidemia de obesidad infantil en Estados Unidos. El Comité Ejecutivo de la empresa recomendó votar en contra y finalmente el 72,33 % de los accionistas la rechazó. 


Los accionistas pedían al Consejo de Administración emitir un informe sobre nuevas políticas a manera de respuesta a las preocupaciones públicas sobre los vínculos entre la comida rápida y la obesidad infantil, las enfermedades relacionadas con la dieta y otros impactos en la salud infantil. El informe debía incluir una evaluación de los impactos potenciales de estas preocupaciones sociales y de  las posibles políticas públicas sobre la evolución de las finanzas de la empresa.

El Directorio recomendaba votar en contra de la Proposición "a la luz de la historia de la empresa que siempre reportó con transparencia sus actividades", según consta en el Documento de Declaraciones sometido a consideración de la Asamblea.

La empresa reconoce la importancia del tema de la salud y nutrición de los niños pero considera que son problemas mundiales que requieren acciones que van mucho más allá de lo que la empresa o cualquier otro comercializador de alimentos puede hacer por sí mismo.

"Estamos comprometidos a ser parte del esfuerzo para resolver los problemas subyacentes a estas preocupaciones. Ofrecemos una variedad de opciones de comida a nuestros clientes, proporcionamos información nutricional acerca de nuestro menú para que las familias puedan tomar decisiones; nos comunicamos con los niños de una manera responsable a través de un marketing apropiado para su edad y alentamos a los niños y a las familias a vivir estilos de vida equilibrados y activos", considera McDonalds.

Citan, además, los informes sobre actividades de alimentación y nutrición en los Estados Unidos que se encuentran en su página web.

A propósito del marketing dirigido a niños, días atrás más de 500 médicos de Estados Unidos firmaron una carta abierta dirigida al CEO de la cadena de comida rápida McDonald’s exigiendo que deje de realizar publicidad comercial dirigida a niños. Los profesionales de la salud señalan el impacto que ese tipo de alimentos tiene en los altos índices de obesidad infantil que se registran en la población de ese país.

Para el grupo accionista que presentó la propuesta "la contribución de la industria de la comida rápida a nivel mundial a la epidemia de obesidad infantil y a las enfermedades relacionadas con la dieta, tales como la diabetes, cáncer y las enfermedades cardiovasculares, se han convertido en un asunto público importante".

Advierten sobre una serie de posibles regulaciones que podrían impactar sobre el negocio de la empresa, como las de algunos estados que ya prohibieron las acciones de marketing dirigidas a niños.

Organizaciones solicitantes del estudio:

The Sisters of St. Francis of Philadelphia, the Benedictine Sisters of Mount St. Scholastica, Trinity Health, Academy of Our Lady of Lourdes, Benedictine Sisters of Mt. Angel, Sisters of St. Dominic, Congregation of the Most Holy Name, Benedictine Sisters of Boerne, Texas, Sisters of Charity of the Blessed Virgin Mary, Mercy Investment Services Inc., Adrian Dominican Sisters, Sisters of Saint Dominic of Tacoma, Catholic Health East, Friends Fiduciary y Catholic Healthcare Partner