Esto fue anunciado oficialmente por la responsable de Relaciones Laborales del Departamento de Negocios, Innovación y Habilidades, Jo Swinson, alegando que "pagar por debajo del salario mínimo es ilegal" y avisando a los empresarios que mantengan esta práctica que "están incumpliendo la ley" y se tomarán contra ellos "acciones contundentes".

Swinson dijo que se están quitando las restricciones a la ley de salario mínimo, un nuevo esquema que entrará en vigor a partir de octubre de 2013. La ley establecía que desde el 1 de enero de 2011 se podía hacer público el nombre de quienes pagan menos del salario mínimo, aunque establecía siete requisitos bastante estrictos para poder llegar a ese punto. Entre otros, que la cantidad mínima de salario adeudado a los trabajadores fuera al menos 2.000 libras esterlinas y que la media por trabajador llegara a las 500 libras.

Esto había provocado que entre 2012 y 2013 sólo un empresario fuera denunciado por esta práctica, lo que ha llevado al Gobierno de David Cameron a reconsiderar las normas y a eliminar esos requisitos para simplificar el procedimiento de denuncia pública.

El Departamento de Negocios del Gobierno Británico afirmó en el comunicado oficial que la mención de los que violen la ley se utilizará como publicidad negativa, como un disuasivo adicional para aquellas empresas que están tentados a evitar pagar el salario mínimo. Todo esto además de las sanciones pecuniarias que los empresarios ya se enfrentan si no pagan salario mínimo.

Entre 2012 y 2013 se identificaron 736 empresas que habían dejado de pagar el salario mínimo nacional lo que condujo a la recuperación de 3,9 millones de libras esterlinas en salarios pendientes de pago a más de 26.500 trabajadores.