El iPhone 6 de Apple nace con conflictos sindicales en Filipinas
El nuevo producto de Apple que será lanzado a la venta en septiembre de este año es producido con un componente que proviene de la empresa NXP Semiconductors, cuestionada por el despido de 24 dirigentes sindicales en Filipinas. La coalición sindical IndustriALL insta a la empresa a reincorporar a los dirigentes despedidos.
Una amplia coalición de organizaciones que hacen campañas en favor de los trabajadores ha hecho un llamado a la NXP para que reincorpore a los 24 dirigentes sindicales que fueron despedidos ilegalmente el 5 de mayo, durante las negociaciones del convenio colectivo. Sin embargo, aunque la compañía le ha señalado a IndustriALL que está interviniendo y buscando una resolución al conflicto, la realidad es que, en la planta en cuestión, la administración está intensificando sus esfuerzos para acabar con el sindicato. Para la coalición sindical IndustriALL, la política que aplica NXP en su planta en Cabuyao, cerca de Manila, tiene como finalidad destruir el sindicato MWAP. Estos abusos patronales también violan fundamentalmente el código de conducta de NXP, así como los compromisos éticos de Apple respecto a su cadena de suministro.
Apple es un cliente clave de NXP y, según se ha informado, el nuevo iPhone 6 incorpora un microchip NXP; gracias a este microchip, el iPhone 6 incorpora nuevas facilidades para el usuario, como es el pago, de forma inalámbrica, de artículos como boletos de estacionamiento de automóviles y productos comestibles. Más de 150.000 consumidores y activistas le escribieron a Apple como parte de una campaña de SumOfUs que exige su intervención hacer respetar sus compromisos laborales. Aunque Apple ha comenzado un diálogo inicial con IndustriALL, los 24 dirigentes sindicales ilegalmente despedidos todavía no han sido reintegrados.
La empresa proveedora también ha sido denunciada por medidas de intimidación antisindical en la planta en cuestión, situada en la zona franca LISP1, que incluyen: registro de "conducta rebelde" y acusaciones de "merodeo" en contra de los sindicalistas restantes que protestan activamente el despido en masa de sus representantes elegidos; guardias de seguridad toman fotos y graban vídeos de los sindicalistas restantes, incluso mientras están almorzando; cámaras de vigilancia instaladas en toda la planta; y la prohibición de llevar camisetas o de publicar mensajes en los medios de comunicación social con consignas de apoyo a los 24 trabajadores despedidos.
Ante esta situación conflictiva, Reden Alcantara, Presidente del MWAP, dijo a IndustriALL Global Union:“Seguimos firmes. Vamos a seguir luchando contra esta enorme empresa multinacional que se niega a respetar a sus trabajadores. El apoyo de Uds. nos inspira para seguir adelante, y ahora que nos preparamos para intensificar nuestra lucha, contamos con la importante fuerza solidaria de Uds.”
El Ministerio de Trabajo y Empleo de Filipinas está actuando como intermediario en las negociaciones para lograr una solución y ha presentado una propuesta a las dos partes. La oferta del Ministerio incluye un aumento salarial del 5,2 por ciento, la reincorporación de 12 de los 24 dirigentes sindicales que fueron despedidos ilegalmente, y compensación decente por despido para los otros 12 sindicalistas.
Por otro lado, Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL Global Union, dijo al respecto:“El Ministerio de Trabajo y Empleo debería respetar la legislación laboral de Filipinas, insistiendo en el reintegro de todo el comité sindical. MWAP, IndustriALL Global Union, y sus simpatizantes, se mantienen firmes y claros, exigiendo a NXP y Apple la reincorporación de todos los 24 sindicalistas despedidos.”