Empresa pide prisión para activistas ecológicos

17.06.2011 | América Latina

La empresa eléctrica Endesa ha pedido un total de 14 años y ocho meses de prisión para cuatro activistas de Greenpeace que descolgaron una pancarta el pasado 21 de julio de 2008 en protesta por los proyectos de Endesa en la Patagonia chilena. La eléctrica demanda a los ecologistas sanciones que alcanzarían los 84.000 euros. Estas peticiones están recogidas en el escrito de acusación de la empresa, en el proceso que se sigue contra los activistas. Greenpeace denuncia que Endesa pretende intimidarles y silenciarles con estas acusaciones.


 

"Si Endesa piensa que nos vamos a callar, o que nos intimida con este tipo de acusaciones se equivoca. La protesta pacífica de Greenpeace va a continuar contra las agresiones al medio ambiente de Endesa. No tenemos miedo, porque la razón nos asiste" , ha asegurado el Director de Greenpeace Juan López de Uralde.
El pasado 21 de julio de 2008 los miembros de Greenpeace descolgaron una pancarta en la fachada del edificio de Endesa en Madrid para protestar por el proyecto de esta empresa -a través de HydroAysen- de construir cinco grandes presas en la Patagonia chilena. Estos proyectos tendrían un enorme impacto ecológico de llevarse a cabo, por lo que cuentan con una amplia oposición ecologista en Chile y en todo el mundo. Precisamente Greenpeace realizó la protesta cuando Endesa presentó el estudio de impacto ambiental de los proyectos, estudio que ha tenido que retirar por el enorme número de alegaciones recibidas, incluso del propio Gobierno chileno.
Ahora Endesa reclama para cada uno de los activistas de Greenpeace penas que alcanzan los 3 años y ocho meses de prisión. En total 14 años y ocho meses de cárcel por descolgar una pancarta. Además de multas millonarias.
"No cabe duda de que con ello ENDESA pretende intimidar a la oposición y acallar las voces críticas. Es la táctica habitual de las grandes empresas. En todo caso no lo va a conseguir. Pero no cabe duda de que establece un salto cualitativo en la represión de la protesta pacífica en defensa del medio ambiente en España. Habrá que recordar una vez más que la Constitución Española reconoce el derecho ciudadano a alzar la voz en defensa del medio ambiente, por más que a Endesa no parece gustarle" afirma Juan Lopez de Uralde, Director Ejecutivo de Greenpeace España.

"Si Endesa piensa que nos vamos a callar, o que nos intimida con este tipo de acusaciones se equivoca. La protesta pacífica de Greenpeace va a continuar contra las agresiones al medio ambiente de Endesa. No tenemos miedo, porque la razón nos asiste" , ha asegurado el Director de Greenpeace Juan López de Uralde.

El pasado 21 de julio de 2008 los miembros de Greenpeace descolgaron una pancarta en la fachada del edificio de Endesa en Madrid para protestar por el proyecto de esta empresa -a través de HydroAysen- de construir cinco grandes presas en la Patagonia chilena. Estos proyectos tendrían un enorme impacto ecológico de llevarse a cabo, por lo que cuentan con una amplia oposición ecologista en Chile y en todo el mundo. Precisamente Greenpeace realizó la protesta cuando Endesa presentó el estudio de impacto ambiental de los proyectos, estudio que ha tenido que retirar por el enorme número de alegaciones recibidas, incluso del propio Gobierno chileno.

Ahora Endesa reclama para cada uno de los activistas de Greenpeace penas que alcanzan los 3 años y ocho meses de prisión. En total 14 años y ocho meses de cárcel por descolgar una pancarta. Además de multas millonarias.
"No cabe duda de que con ello ENDESA pretende intimidar a la oposición y acallar las voces críticas. Es la táctica habitual de las grandes empresas. En todo caso no lo va a conseguir. Pero no cabe duda de que establece un salto cualitativo en la represión de la protesta pacífica en defensa del medio ambiente en España. Habrá que recordar una vez más que la Constitución Española reconoce el derecho ciudadano a alzar la voz en defensa del medio ambiente, por más que a Endesa no parece gustarle" afirma Juan Lopez de Uralde, Director Ejecutivo de Greenpeace España.