La investigación revela que 2 de cada 3 jóvenes están exigiendo a las compañías a cumplir una obligación moral de ayudar a resolver problemas sociales. El 68,5% cree que las compañías deben usar su conocimiento para ayudar a la sociedad a solucionar sus problemas.

La principal conclusión del estudio evidencia que la nueva generación no solo apunta con el dedo a las compañías que lo hacen mal, sino que las exigen que tomen una posición activa como parte de la solución, lo que TBWAEspaña denomina el CorporActivismo.

En esta línea, el 73% de los jóvenes adultos prefieren comprar productos de una compañía que perciban como socialmente comprometida. Es un fuerte diferenciador de la competencia.

Llevado a cabo en jóvenes de entre 19 y 29 años, la investigación respalda las acciones de responsabilidad corporativa de las compañías y prueba cómo las causas sociales son un activo importante para conectar con esta generación.

“Esta generación no tiene comparación con ninguna otra y marca las pautas de las que le siguen”, según Jesús Fuertes. Para el Director General Estratégico de TBWA España “necesitamos entender sus motivaciones que son mucho más comprometidas que cualquier otra generación que hayamos visto antes ya que cuanto mejor entiendan las marcas esta oportunidad, mejor podrán construir relaciones con esta generación”.

El estudio muestra el rol que cumplen las redes sociales para redefinir el Activismo combinando el apoyo a causas sociales, el uso de la redes sociales y entretenimiento.

83% de los jóvenes adultos hablarían a sus amigos y compartiría contenidos en sus redes sociales sobre una compañía que apoye una causa que les importe.

TBWA España resalta cinco aprendizajes que emanan del estudio para ayudar a las organizaciones a implementar la estrategia del CorporActivismo.

1. Poner temas de inclusión social dentro de la agenda de la compañía, ya sean de apoyo a causas sociales externas a la compañía o el propio comportamiento interno de la misma.

2. Crear contenidos que merezcan la pena ser vistos en los medios y compartidos a través de las redes sociales. Contenidos que activen su comportamiento y  de fácil acceso a la hora de compartirlo con sus amigos.

3. Conectar con las preocupaciones más cercanas de la juventud, encontrando oportunidades locales, especialmente si se es una gran compañía, con las que puedan sentirse identificados e interactuar.

4. Convertir la involucración en una causa de responsabilidad social, en algo más entretenido y que pueda compartir con su red social.

5. Ayudar a los jóvenes a percibir que su apoyo está marcando la diferencia, informar sobre los logros que se están consiguiendo gracias a ellos y crear elementos que hagan tangible su nivel de colaboración.