Fondos para emprendimientos en la Base de la Pirámide

22.07.2011 | Destacadas

El Fondo de Inversión Social IGNIA, una firma de capital de riesgo que sirve a las poblaciones más pobres, recibirá un préstamo de US$5 millones y una donación de cooperación técnica de US$205.000  del Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Banco Interamericano de Desarrollo. El fondo IGNIA se propone invertir entre ocho y doce empresas de América Latina y el Caribe que se encuentren en su fase inicial de desarrollo o en plena expansión y cuya orientación central sea la oferta de soluciones comerciales para encarar aquellas necesidades que están en la base de la pirámide socioeconómica.


 

El FOMIN, en alianza con la Iniciativa Oportunidades para la Mayoría (OM) del BID, cataliza y aprovecha al máximo sus recursos para beneficiar y expandir el acceso al crédito de la mayoría de las personas de bajos ingresos en América Latina y el Caribe.
El fondo IGNIA, con sede en México, es la primera operación combinada en la cual el FOMIN es un inversionista de capitales propios en un fondo respaldado por la OM. Esta última aprobó previamente a IGNIA un préstamo prioritario de hasta US$25 millones para permitirle incrementar su capital de inversión. El fondo buscará reunir hasta US$75 millones en compromisos de financiación por parte de inversionistas institucionales y oficinas afiliadas y espera salir en 12 años.
"El fondo IGNIA trata de conectar a las personas que se encuentran en la base de la pirámide económica con el mundo corporativo", afirmó la jefa del equipo del FOMIN, Susana García-Robles. "El fondo es dirigido por Álvaro Rodríguez Arregui y Michael Chu, que han sido ejes fundamentales en el éxito de las microfinanzas en América Latina, y que también tienen experiencia en el manejo de fondos propios privados y de capitales emprendedores".
"Al apoyar a IGNIA, el FOMIN no sólo respalda la creación de una nueva firma de capitales emprendedores orientada al servicio del sector que se encuentra en la base de la pirámide, sino que, al mismo tiempo, ayuda a la creación de un nuevo segmento dentro de la propia industria de capital de riesgo, enfocado en la lucha contra la pobreza, combinando las lecciones aprendidas a partir del éxito de las microfinanzas con las herramientas financieras propias de las empresas de capital de riesgo" explicó García-Robles. "El efecto de demostración de este fondo puede abrir el camino a muchas otras iniciativas similares en la región".

El FOMIN, en alianza con la Iniciativa Oportunidades para la Mayoría (OM) del BID, cataliza y aprovecha al máximo sus recursos para beneficiar y expandir el acceso al crédito de la mayoría de las personas de bajos ingresos en América Latina y el Caribe.
El fondo IGNIA, con sede en México, es la primera operación combinada en la cual el FOMIN es un inversionista de capitales propios en un fondo respaldado por la OM. Esta última aprobó previamente a IGNIA un préstamo prioritario de hasta US$25 millones para permitirle incrementar su capital de inversión. El fondo buscará reunir hasta US$75 millones en compromisos de financiación por parte de inversionistas institucionales y oficinas afiliadas y espera salir en 12 años.

"El fondo IGNIA trata de conectar a las personas que se encuentran en la base de la pirámide económica con el mundo corporativo", afirmó la jefa del equipo del FOMIN, Susana García-Robles. "El fondo es dirigido por Álvaro Rodríguez Arregui y Michael Chu, que han sido ejes fundamentales en el éxito de las microfinanzas en América Latina, y que también tienen experiencia en el manejo de fondos propios privados y de capitales emprendedores".

"Al apoyar a IGNIA, el FOMIN no sólo respalda la creación de una nueva firma de capitales emprendedores orientada al servicio del sector que se encuentra en la base de la pirámide, sino que, al mismo tiempo, ayuda a la creación de un nuevo segmento dentro de la propia industria de capital de riesgo, enfocado en la lucha contra la pobreza, combinando las lecciones aprendidas a partir del éxito de las microfinanzas con las herramientas financieras propias de las empresas de capital de riesgo" explicó García-Robles. "El efecto de demostración de este fondo puede abrir el camino a muchas otras iniciativas similares en la región".