La UE destina 100 millones para que los desocupados creen empresas

15.06.2011 | Mundo

La Comisión Europea ha propuesto la creación de un nuevo instrumento de microfinanciación que ofrezca microcréditos a pequeñas empresas y a gente que haya perdido su trabajo y desee establecer un pequeño negocio propio. El instrumento de microfinanciación contará con un presupuesto inicial de 100 millones euros, que podría movilizar más de 500 millones EUR en una iniciativa conjunta con instituciones financieras internacionales, en particular el Grupo Banco Europeo de Inversiones (BEI). El nuevo instrumento constituye una de las acciones anunciadas el 3 de junio en la comunicación de la Comisión "Un compromiso compartido en favor del empleo".


 

"La crisis económica hará que este año pierdan su trabajo en la UE tres millones y medio de personas. La crisis financiera ha agotado el crédito para quienes desean crear o desarrollar su propia empresa", declaró Vladimír ¦pidla, Comisario de Empleo y Asuntos Sociales, que añadió: "En la actual recesión, queremos ofrecer un nuevo comienzo a las personas en paro, facilitándoles el acceso a créditos para crear empresas o desarrollar otras ya existentes, y queremos también ayudar a las pequeñas empresas a que se desarrollen a pesar de la crisis. Con ello ayudaremos a crear puestos de trabajo. La UE puede proporcionar un auténtico valor añadido maximizando el apalancamiento financiero en cooperación con el Grupo BEI y dando así a más personas la oportunidad de hacer realidad sus sueños como empresarias".
La actual recesión económica comenzó como una crisis financiera generada por unos problemas graves de liquidez: los bancos no solo dejaron de prestarse unos a otros, sino que también dejaron de conceder préstamos a la gente para hacer negocios y crear puestos de trabajo. La finalidad del nuevo instrumento de microfinanciación es ponérselo más fácil a las personas que, en el actual contexto de oferta crediticia reducida, podrían tener dificultades a la hora de acceder a fondos para la creación de empresas.
Los trabajadores que han perdido su empleo o corren el riesgo de perderlo y desean establecer su propio negocio tendrán un mejor acceso a fondos y se beneficiarán de medidas de apoyo adicionales, como tutoría, formación y entrenamiento. Las personas con discapacidad, en especial las jóvenes, que quieran crear una pequeña empresa o desarrollar la que ya tienen también se beneficiarán de garantías y de asistencia para preparar su plan de empresa.
Se espera que el presupuesto inicial de 100 millones EUR movilice 500 millones EUR de crédito en cooperación con instituciones financieras internacionales, como el Grupo BEI. Esto podría dar lugar a cerca de 45 000 préstamos a lo largo de un periodo de hasta ocho años. Además, el acceso a los fondos será aún más fácil con la posibilidad de aplicar a los préstamos rebajas del tipo de interés del Fondo Social Europeo.
En la UE, microcrédito significa préstamos inferiores a 25 000 EUR. Los microcréditos están diseñados para microempresas, con menos de diez empleados (el 91% de todas las empresas europeas), y para personas en paro o inactivas que quieren hacerse trabajadoras autónomas pero no tienen acceso a los servicios bancarios tradicionales. El 99% de las empresas que se crean en Europa son microempresas o pequeñas empresas, y un tercio de ellas son creadas por personas sin trabajo.
La propuesta de la Comisión será debatida por los Estados miembros de la UE en el Consejo de Ministros (voto por mayoría cualificada) y por el Parlamento Europeo, siguiendo el procedimiento de codecisión. La Comisión espera que el nuevo instrumento de microfinanciación del programa Progress esté operativo en 2010.
(Expansión & Empleo)

"La crisis económica hará que este año pierdan su trabajo en la UE tres millones y medio de personas. La crisis financiera ha agotado el crédito para quienes desean crear o desarrollar su propia empresa", declaró Vladimír ¦pidla, Comisario de Empleo y Asuntos Sociales, que añadió:

"En la actual recesión, queremos ofrecer un nuevo comienzo a las personas en paro, facilitándoles el acceso a créditos para crear empresas o desarrollar otras ya existentes, y queremos también ayudar a las pequeñas empresas a que se desarrollen a pesar de la crisis. Con ello ayudaremos a crear puestos de trabajo. La UE puede proporcionar un auténtico valor añadido maximizando el apalancamiento financiero en cooperación con el Grupo BEI y dando así a más personas la oportunidad de hacer realidad sus sueños como empresarias".

La actual recesión económica comenzó como una crisis financiera generada por unos problemas graves de liquidez: los bancos no solo dejaron de prestarse unos a otros, sino que también dejaron de conceder préstamos a la gente para hacer negocios y crear puestos de trabajo. La finalidad del nuevo instrumento de microfinanciación es ponérselo más fácil a las personas que, en el actual contexto de oferta crediticia reducida, podrían tener dificultades a la hora de acceder a fondos para la creación de empresas.

Los trabajadores que han perdido su empleo o corren el riesgo de perderlo y desean establecer su propio negocio tendrán un mejor acceso a fondos y se beneficiarán de medidas de apoyo adicionales, como tutoría, formación y entrenamiento. Las personas con discapacidad, en especial las jóvenes, que quieran crear una pequeña empresa o desarrollar la que ya tienen también se beneficiarán de garantías y de asistencia para preparar su plan de empresa.
Se espera que el presupuesto inicial de 100 millones EUR movilice 500 millones EUR de crédito en cooperación con instituciones financieras internacionales, como el Grupo BEI. Esto podría dar lugar a cerca de 45 000 préstamos a lo largo de un periodo de hasta ocho años. Además, el acceso a los fondos será aún más fácil con la posibilidad de aplicar a los préstamos rebajas del tipo de interés del Fondo Social Europeo.

En la UE, microcrédito significa préstamos inferiores a 25 000 EUR. Los microcréditos están diseñados para microempresas, con menos de diez empleados (el 91% de todas las empresas europeas), y para personas en paro o inactivas que quieren hacerse trabajadoras autónomas pero no tienen acceso a los servicios bancarios tradicionales. El 99% de las empresas que se crean en Europa son microempresas o pequeñas empresas, y un tercio de ellas son creadas por personas sin trabajo.

La propuesta de la Comisión será debatida por los Estados miembros de la UE en el Consejo de Ministros (voto por mayoría cualificada) y por el Parlamento Europeo, siguiendo el procedimiento de codecisión. La Comisión espera que el nuevo instrumento de microfinanciación del programa Progress esté operativo en 2010.

(Expansión & Empleo)