Las nuevas perspectivas de integración al discapacitado
Por Antonio Coppola, Presidente de la Comisión para la Plena Participación en Integración de las Personas con Necesidades Especiales. Ya avanzado el siglo XXI, la situación de los discapacitados sigue siendo de postergación y de discriminación. Subsisten prejuicios, falsedades e ideologías alejadas de la solidaridad e integración. No es necesario recurrir a extensos estudios o los análisis de especialistas, para ratificar estos conceptos.
Alcanza con observar la realidad cotidiana que puede advertirse en cualquier ámbito urbano, o analizar el cuerpo normativo que rige a nivel nacional, provincial e incluso municipal. La doctrina prevalente se basa en el establecimiento de políticas de patronato, con fuerte tendencia a la reclusión, pretendiendo de tal modo asumir una posición protectiva. Como señalaba en su tratado "Historia general de la locura" Michel Foucault, "desde la antigüedad, el objetivo es ocultar al distinto, esconder al diferente tras los altos muros de los hospicios. El sentimiento que persiste es evitar el contacto, por miedo al contagio, a la reproducción. El espíritu humano deja caer la compasión, como primer reflejo del instinto de conservación, quizá el más primario de los reflejos".
En tal sentido, luego de una prolongada tarea de sensibilización y compartiendo un proyecto político renovador, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ha establecido con rango constitucional, los derechos de la personas con necesidades especiales (Capítulo 13Â de la Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires), donde en el artículo 42Â se establece que " La Ciudad garantiza a las personas con necesidades especiales el derecho a su plena integración, a la información y a la equiparación de oportunidades. Ejecuta políticas de promoción y protección integral, tendientes a la prevención, rehabilitación, capacitación, educación e inserción social y laboral. Prevé el desarrollo de un hábitat libre de barreras naturales, culturales, lingüisticas, comunicacionales, sociales, educacionales, arquitectónicas, urbanísticas, del transporte y de cualquier otro tipo, y la eliminación de las existentes".
En tal sentido, el compromiso asumido por la actual gestión encabezada por Aníbal Ibarra, es inequívoco y se ha visto plasmado con hechos, como la sanción de la Ley 962, de Accesibilidad Fìsica para Todos. Además, el Ejecutivo envió la iniciativa, ahora transformada en Ley 477 tras su aprobación legislativa, donde se establece un Régimen Básico e Integral para dar cumplimiento a lo prescripto por el art 42 de la Constitución. Allí se establece la creación de COPINE (Comisión para la Plena Participación e Integración de las Personas con Capacidades Especiales), es el organismo encargado de elaborar y coordinar las polìticas de integración de las diferentes discapacidades que existen en la sociedad.
Para tal fin cuenta con el asesoramiento de un Comité Consultivo Honorario integrado por represenantes de los organismos y entidades públicas y de las organizaciones no gubernamentales (Ong) de la ciudad, cuyo objeto social se vincule con la problemática de las personas con necesidades especiales y que tengan como mínimo dos años de antigüedad legalmente reconocida.
El año pasado se constituyó la Comisión para la Plena Participación e Integración de Personas con Necesidades Especiales (COPINE), dentro del ámbito de la Subsecretaría de Derechos Humanos. Pero además se respalda el accionar del organismo con una nueva normativa, de vanguardia a nivel internacional. Como corolario del compromiso asumido en el ámbito de la Ciudad, a fines del año pasado se sancionó la Ley 1.502, que tiene por objeto regular la incorporación, en una proporción no inferior al cinco por ciento, de personas con necesidades especiales al Sector Público de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. A tal efecto se crea un Registro Laboral Unico de Aspirantes con Necesidades Especiales, dando cumplimiento a lo establecido por el art. 43Â de la Constitución, que señala, " Asegurar un cupo del cinco por ciento del personal para las personas con necesidades especiales, con incorporación gradual en la forma que la ley determine.
En todo contrato de concesión de servicios o de transferencia de actividades al sector privado, se preverá la aplicación estricta de esta disposición", en el Capítulo 14Â referido a Trabajo y Seguridad Social. La labor de COPINE en este aspecto es permanente y destinada a optimizar la normativa. Estamos convencidos que su implementación adecuada en el área pública, tendrá un efecto multiplicador en el sector privado, donde las nuevas estrategias de Responsabilidad Social Empresaria, confluyen para superar etapas de relegamiento y ostracismo, que deben quedar definitivamente superadas.
Estoy convencido que el espíritu solidario superará las difíciles pruebas que deberá afrontar esta innovadora normativa destinada a mejorar la calidad de vida de toda la sociedad. La plena integración de las personas con necesidades especiales, no implica beneficios para un sector; las mejoras que se consigan, serán para todos.