Latinoamérica pide que política ambiental incida en desarrollo social de región

12.07.2011 | América Latina

Los países latinoamericanos pidieron a la Unión Europea (UE) que la cooperación en medio ambiente y la lucha contra el cambio climático tenga en cuenta la necesidad de desarrollo social de su región.


 

Los ministros de Medio Ambiente de la UE y de América Latina y el Caribe celebran hoy su primera reunión conjunta, para preparar una parte esencial de la cumbre de líderes de ambas regiones que se celebrará en Lima (Perú) el 16 y 17 de mayo próximo.
Por parte latinoamericana, el presidente del Consejo Nacional de Medio Ambiente (CONAM), Manuel Ernesto Bernales, destacó que las poblaciones más pobres de la región sufren las consecuencias del cambio climático sin haber contribuido a su generación.
'La lucha contra el cambio climático para evitar la pérdida de biodiversidad es también para evitar la pérdida de su diversidad cultural y de su identidad', afirmó Bernales en una conferencia de prensa conjunta con los responsables comunitarios tras la primera parte de la reunión.
Añadió que, con esas poblaciones pobres 'van a tener un beneficio en términos de su supervivencia, de salir de la pobreza' cuando se pongan en marcha los esquemas de desarrollo sostenible, sobre dos ejes: la lucha contra la pobreza extrema y la superación de los riesgos ambientales'.
'La declaración de Lima tiene que ser una declaración estratégica' en este sentido, enfatizó Bernales.
El ministro de Medio Ambiente de Eslovenia, Janez Podobnik, destacó en nombre de la presidencia de turno de la Unión Europea, que la reunión de hoy es 'un primer paso' para estrechar aún más la cooperación con Latinoamérica y el Caribe.
En este sentido, resaltó que los 61 países asistentes a esta reunión están 'decididos' a promover y acelerar la agenda de Bali para conseguir un acuerdo global que sustituya a partir de 2013 al Protocolo de Kioto.
El objetivo de europeos y latinoamericanos es cooperar esencialmente en tres asuntos: adaptación al cambio climático y mitigación de sus efectos, energía y biodiversidad y deforestación.
Bernales insistió en la importancia de que las inversiones energéticas, como en biocombustibles, se hagan con un riguroso estudio de sus impactos medioambientales y un proyecto a largo plazo de 'su eficiencia social', sin buscar simplemente rendimientos económicos a corto plazo.
Por ello, señaló que la cumbre de Lima debe arrojar un 'acuerdo sustantivo' que incluya 'una mejora en la cantidad y la calidad de la ayuda oficial al desarrollo, y la mejora de los procesos de inversión en el sector medioambiental y energético.
(EFE)

Los ministros de Medio Ambiente de la UE y de América Latina y el Caribe celebran hoy su primera reunión conjunta, para preparar una parte esencial de la cumbre de líderes de ambas regiones que se celebrará en Lima (Perú) el 16 y 17 de mayo próximo.
Por parte latinoamericana, el presidente del Consejo Nacional de Medio Ambiente (CONAM), Manuel Ernesto Bernales, destacó que las poblaciones más pobres de la región sufren las consecuencias del cambio climático sin haber contribuido a su generación.
'La lucha contra el cambio climático para evitar la pérdida de biodiversidad es también para evitar la pérdida de su diversidad cultural y de su identidad', afirmó Bernales en una conferencia de prensa conjunta con los responsables comunitarios tras la primera parte de la reunión.

Añadió que, con esas poblaciones pobres 'van a tener un beneficio en términos de su supervivencia, de salir de la pobreza' cuando se pongan en marcha los esquemas de desarrollo sostenible, sobre dos ejes: la lucha contra la pobreza extrema y la superación de los riesgos ambientales'.
'La declaración de Lima tiene que ser una declaración estratégica' en este sentido, enfatizó Bernales.
El ministro de Medio Ambiente de Eslovenia, Janez Podobnik, destacó en nombre de la presidencia de turno de la Unión Europea, que la reunión de hoy es 'un primer paso' para estrechar aún más la cooperación con Latinoamérica y el Caribe.

En este sentido, resaltó que los 61 países asistentes a esta reunión están 'decididos' a promover y acelerar la agenda de Bali para conseguir un acuerdo global que sustituya a partir de 2013 al Protocolo de Kioto.
El objetivo de europeos y latinoamericanos es cooperar esencialmente en tres asuntos: adaptación al cambio climático y mitigación de sus efectos, energía y biodiversidad y deforestación.
Bernales insistió en la importancia de que las inversiones energéticas, como en biocombustibles, se hagan con un riguroso estudio de sus impactos medioambientales y un proyecto a largo plazo de 'su eficiencia social', sin buscar simplemente rendimientos económicos a corto plazo.

Por ello, señaló que la cumbre de Lima debe arrojar un 'acuerdo sustantivo' que incluya 'una mejora en la cantidad y la calidad de la ayuda oficial al desarrollo, y la mejora de los procesos de inversión en el sector medioambiental y energético.
(EFE)