Los “mega-factores” que impactarán sobre la sustentabilidad en los negocios

14.06.2012 | Destacadas

Una nueva investigación de KPMG International identificó 10 “mega-factores” que afectarán significativamente el crecimiento corporativo a nivel global en las próximas dos décadas. Además, el estudio demostró que los costos de los impactos ambientales de las operaciones de negocios se duplican cada 14 años, y que las compañías deberían esperar aumentos en los costos ambientales externos que actualmente no suelen presentarse en los estados contables.


 

El estudio de KPMG, Expect the Unexpected: Building Business Value in a Changing World, (“Esperar lo inesperado: crear valor para los negocios en un mundo cambiante”) explora temas como el cambio climático, la volatilidad de la energía y el combustible, la disponibilidad del agua y los costos, y la disponibilidad de los recursos, así como el crecimiento de la población hacia los nuevos centros urbanos. El análisis examina los factores globales que pueden impactar en el negocio y la industria, calcula los costos ambientales para el negocio y convoca a los empresarios y a los responsables de establecer políticas a trabajar más estrechamente para mitigar el riesgo futuro del negocio y actuar sobre las oportunidades.
“Vivimos en un mundo de recursos limitados. El rápido crecimiento de los mercados en desarrollo, el cambio climático y los problemas de energía y agua potable se encuentran dentro de los factores que generarán mayores presiones tanto en el negocio como en la sociedad”, dijo Michael Andrew, Presidente de KPMG International. “Sabemos que los gobiernos no pueden enfrentar estos desafíos solos. Los empresarios tienen que asumir una función de liderazgo en el desarrollo de soluciones que ayudarán a crear un futuro sustentable. Al hacer uso de su capacidad para mejorar procesos, generar eficiencia, administrar el riesgo e impulsar la innovación, las empresas contribuirán a la sociedad y al crecimiento económico a largo plazo”.
La investigación de KPMG reveló que los costos ambientales externos de 11 sectores clave de la industria aumentaron un 50%, pasando de USD 566.000 a USD846.000 millones en ocho años (2002 al 2010), y, en promedio, se estima una duplicación de estos costos cada 14 años. Según el informe, si las compañías tuvieran que pagar todos los costos ambientales generados por la producción, perderían, en promedio, 0,41 centavos por cada USD 1 que se gana. En este marco, los empresarios y los responsables de establecer políticas deben tomar decisiones estratégicas conjuntas y actuar.
Yvo de Boer, Asesor Global especial de KPMG en temas de Cambio Climático y Sustentabilidad dijo que los mega-factores globales respecto de la sustentabilidad aumentarán significativamente la complejidad del entorno de negocios. “Sin acción y planificación estratégica, se multiplicarán los riesgos y se perderán las oportunidades. Las empresas reconocen que existe valor y oportunidad en la responsabilidad más allá de los resultados del próximo trimestre; que lo que es bueno para la gente y para el planeta también puede ser bueno para los resultados a largo plazo y el valor del accionista”, expresó Boer.
John B. Veihmeyer, presidente de la región KPMG's Americas, también presidente y CEO de KPMG LLP (US) dijo: KPMG ha asumido la función de liderazgo para ayudar a las organizaciones a entender, en esta ecuación, la oportunidad y no solo el riesgo. “Los clientes de KPMG y otros están viendo más claramente la relación entre la sustentabilidad y los resultados financieros. Las compañías que reconocen las influencias externas en sus organizaciones y las convierten en oportunidades obtienen una ventaja competitiva. A ese fin, el ejercicio de medir e informar actividades sustentables a las partes de interés con datos claros y precisos es muy importante y se está convirtiendo en una prioridad.”
Los 10 mega-factores globales respecto de la sustentabilidad que pueden tener un impacto en los negocios en las próximas dos décadas son:
 
Cambio climático: este puede ser el mega-factor global que a su vez tiene un impacto directo sobre los demás. Las predicciones de pérdidas anuales generadas por el cambio climático van desde el 1% anual, si  se adoptan acciones inmediatas, hasta el 5% anual—si los responsables de establecer políticas no actúan.
Energía y combustible: los mercados de combustibles fósiles muestran una fuerte tenencia a la mayor volatilidad e imprevisibilidad debido al aumento global de la demanda de energía; los cambios en el patrón geográfico del consumo; las      incertidumbres respecto del abastecimiento y la producción y la mayor intervención normativa relacionada con el cambio climático.
Escasez de recursos materiales: a medida que los países en desarrollo se industrializan rápidamente, se predice el fuerte aumento de la demanda global de recursos materiales. Los negocios enfrentarán restricciones en el intercambio comercial y una intensa competencia global en relación con una gran variedad de recursos materiales, cuya disponibilidad se verá cada vez más comprometida. La escasez también genera oportunidades para desarrollar materiales sustitutos o para recuperar materiales de lo que se desecha.
Escasez de agua: se estima que para el año 2030, la demanda global de agua potable excederá el 40% del abastecimiento. Los negocios pueden quedar vulnerables ante la escasez de agua, la menor calidad del agua, la volatilidad del precio del agua y los desafíos en relación con la imagen.
Crecimiento de la población: se espera que la población mundial alcance los 8.4 mil millones para el año 2032. Esto genera presiones intensas en los ecosistemas y el abastecimiento por parte de los recursos naturales, tales como alimentos, agua, energía y materiales. Aunque esta es una amenaza para el negocio, existen oportunidades para generar una mayor actividad comercial y crear puestos de trabajo, y para innovar de manera de atender las necesidades de una población en aumento respecto de la agricultura, higiene, educación, tecnología, finanzas y salud.
Riqueza: se predice un crecimiento de la clase media global (definida por la OCDE como las personas cuya disponibilidad económica varía entre USD10 y USD100 por persona por día) del 172 por ciento entre los años 2010 y 2030. El desafío de los negocios es abastecer a esta nueva clase media en tiempos de escasez de recursos y mayor volatilidad en los precios. Las ventajas aprovechadas por muchas compañías en las últimas dos décadas de utilizar “mano de obra barata” en las naciones en desarrollo comenzará a desaparecer debido al crecimiento y poder de la clase media global.
Urbanización: en 2009, por primera vez, más gente prefirió vivir en las ciudades que en el campo. Para el 2030, se estima que todas las regiones en desarrollo inclusive Asia y África tendrán una mayor cantidad de habitantes en las zonas urbanas; supuestamente todo el Crecimiento de la Población en los próximos 30 años se dará en las ciudades. Estas ciudades requerirán mejoras en infraestructura como ser en la construcción, agua, higiene, electricidad, residuos, transporte, salud, seguridad pública y conectividad a Internet y celulares.
Alimentos: en las próximas décadas, el sistema global de producción de alimentos se encontrará sujeto a las fuertes presiones ejercidas por los mega-factores: crecimiento de la población, escasez de agua y deforestación. Se predice que los precios globales de los alimentos aumentarán entre 70 y 90% para el 2030. En las regiones de escasez de agua, los productores agropecuarios deberán competir por los insumos con otras industrias que hacen un uso intensivo del agua, tal es el caso de la electricidad y la minería, y con los consumidores. Se requerirá intervención para revertir el aumento de la escasez de alimentos en determinadas áreas (la cantidad de personas con desnutrición crónica aumentó de 842 millones durante la década del 90 a más de 1000 millones en el 2009).
Deterioro del ecosistema: históricamente, el principal riesgo relacionado con el deterioro de la biodiversidad y el ecosistema significaba para las empresas el daño a la imagen. Sin embargo, a medida que los ecosistemas muestran señales de degradación, muchas compañías se dan cuenta de la dependencia existente entre sus operaciones y los servicios provistos por estos ecosistemas. El deterioro de los ecosistemas hace que los recursos naturales sean más escasos, más costosos y reduce la diversidad; aumentando el costo del agua y del daño provocado por la presencia de especies invasoras en diversos sectores como la agricultura, la pesca, los alimentos y bebidas, los productos farmacéuticos y el turismo.
Deforestación: Los bosques son un gran negocio – los productos de la madera aportaron USD100.000 millones al año a la economía global desde el 2003 al 2007, y el valor de los productos derivados de los bosques que no son madera, alimentos en su mayoría, se estimó en aproximadamente USD18.5 mil millones en 2005. Sin embargo, según las proyecciones de la OCDE, las áreas forestadas caerán globalmente un 13% de 2005 a 2030, especialmente en América del Sur y África. La industria maderera y las industrias de producción, tales como  las pasteras y papeleras son vulnerables a una posible legislación que las obligue a ralentizar o revertir la deforestación. Las compañías también se encontrarán sujetas a las presiones que ejercen los clientes al exigir que los productos sean      sustentables bajo normas de certificación. Las oportunidades de negocios pueden surgir a partir del desarrollo de mecanismos del mercado e incentivos económicos para reducir el índice de deforestación.
El informe fue publicado el día de apertura de la cumbre global de KPMG “Business Perspective on Sustainable Growth: Preparing for Rio+20” ("Perspectiva del negocio sobre la base de un crecimiento sustentable: preparándose para Rio+20") que tuvo lugar en Nueva York. El evento atrajo a más de 400 CEO y líderes de muchas de las empresas más importantes del mundo, junto con responsables de establecer políticas clave. KPMG International fue el anfitrión del evento en colaboración con United Nations Global Compact (UNGC), el World Business Council for Sustainable Development (WBCSD) y el United Nations Environment Programme (UNEP).

El estudio de KPMG, Expect the Unexpected: Building Business Value in a Changing World, (“Esperar lo inesperado: crear valor para los negocios en un mundo cambiante”) explora temas como el cambio climático, la volatilidad de la energía y el combustible, la disponibilidad del agua y los costos, y la disponibilidad de los recursos, así como el crecimiento de la población hacia los nuevos centros urbanos.

El análisis examina los factores globales que pueden impactar en el negocio y la industria, calcula los costos ambientales para el negocio y convoca a los empresarios y a los responsables de establecer políticas a trabajar más estrechamente para mitigar el riesgo futuro del negocio y actuar sobre las oportunidades.

“Vivimos en un mundo de recursos limitados. El rápido crecimiento de los mercados en desarrollo, el cambio climático y los problemas de energía y agua potable se encuentran dentro de los factores que generarán mayores presiones tanto en el negocio como en la sociedad”, dijo Michael Andrew, Presidente de KPMG International. “Sabemos que los gobiernos no pueden enfrentar estos desafíos solos. Los empresarios tienen que asumir una función de liderazgo en el desarrollo de soluciones que ayudarán a crear un futuro sustentable. Al hacer uso de su capacidad para mejorar procesos, generar eficiencia, administrar el riesgo e impulsar la innovación, las empresas contribuirán a la sociedad y al crecimiento económico a largo plazo”.

La investigación de KPMG reveló que los costos ambientales externos de 11 sectores clave de la industria aumentaron un 50%, pasando de USD 566.000 a USD846.000 millones en ocho años (2002 al 2010), y, en promedio, se estima una duplicación de estos costos cada 14 años. Según el informe, si las compañías tuvieran que pagar todos los costos ambientales generados por la producción, perderían, en promedio, 0,41 centavos por cada USD 1 que se gana.

En este marco, los empresarios y los responsables de establecer políticas deben tomar decisiones estratégicas conjuntas y actuar.

Yvo de Boer, Asesor Global especial de KPMG en temas de Cambio Climático y Sustentabilidad dijo que los mega-factores globales respecto de la sustentabilidad aumentarán significativamente la complejidad del entorno de negocios. “Sin acción y planificación estratégica, se multiplicarán los riesgos y se perderán las oportunidades. Las empresas reconocen que existe valor y oportunidad en la responsabilidad más allá de los resultados del próximo trimestre; que lo que es bueno para la gente y para el planeta también puede ser bueno para los resultados a largo plazo y el valor del accionista”, expresó Boer.

John B. Veihmeyer, presidente de la región KPMG's Americas, también presidente y CEO de KPMG LLP (US) dijo: KPMG ha asumido la función de liderazgo para ayudar a las organizaciones a entender, en esta ecuación, la oportunidad y no solo el riesgo. “Los clientes de KPMG y otros están viendo más claramente la relación entre la sustentabilidad y los resultados financieros. Las compañías que reconocen las influencias externas en sus organizaciones y las convierten en oportunidades obtienen una ventaja competitiva. A ese fin, el ejercicio de medir e informar actividades sustentables a las partes de interés con datos claros y precisos es muy importante y se está convirtiendo en una prioridad.

”Los 10 mega-factores globales respecto de la sustentabilidad que pueden tener un impacto en los negocios en las próximas dos décadas son: 

Cambio climático: este puede ser el mega-factor global que a su vez tiene un impacto directo sobre los demás. Las predicciones de pérdidas anuales generadas por el cambio climático van desde el 1% anual, si  se adoptan acciones inmediatas, hasta el 5% anual—si los responsables de establecer políticas no actúan.

Energía y combustible: los mercados de combustibles fósiles muestran una fuerte tenencia a la mayor volatilidad e imprevisibilidad debido al aumento global de la demanda de energía; los cambios en el patrón geográfico del consumo; las      incertidumbres respecto del abastecimiento y la producción y la mayor intervención normativa relacionada con el cambio climático.

Escasez de recursos materiales: a medida que los países en desarrollo se industrializan rápidamente, se predice el fuerte aumento de la demanda global de recursos materiales. Los negocios enfrentarán restricciones en el intercambio comercial y una intensa competencia global en relación con una gran variedad de recursos materiales, cuya disponibilidad se verá cada vez más comprometida. La escasez también genera oportunidades para desarrollar materiales sustitutos o para recuperar materiales de lo que se desecha.

Escasez de agua: se estima que para el año 2030, la demanda global de agua potable excederá el 40% del abastecimiento. Los negocios pueden quedar vulnerables ante la escasez de agua, la menor calidad del agua, la volatilidad del precio del agua y los desafíos en relación con la imagen.

Crecimiento de la población: se espera que la población mundial alcance los 8.4 mil millones para el año 2032. Esto genera presiones intensas en los ecosistemas y el abastecimiento por parte de los recursos naturales, tales como alimentos, agua, energía y materiales. Aunque esta es una amenaza para el negocio, existen oportunidades para generar una mayor actividad comercial y crear puestos de trabajo, y para innovar de manera de atender las necesidades de una población en aumento respecto de la agricultura, higiene, educación, tecnología, finanzas y salud.

Riqueza: se predice un crecimiento de la clase media global (definida por la OCDE como las personas cuya disponibilidad económica varía entre USD10 y USD100 por persona por día) del 172 por ciento entre los años 2010 y 2030. El desafío de los negocios es abastecer a esta nueva clase media en tiempos de escasez de recursos y mayor volatilidad en los precios. Las ventajas aprovechadas por muchas compañías en las últimas dos décadas de utilizar “mano de obra barata” en las naciones en desarrollo comenzará a desaparecer debido al crecimiento y poder de la clase media global.

Urbanización: en 2009, por primera vez, más gente prefirió vivir en las ciudades que en el campo. Para el 2030, se estima que todas las regiones en desarrollo inclusive Asia y África tendrán una mayor cantidad de habitantes en las zonas urbanas; supuestamente todo el Crecimiento de la Población en los próximos 30 años se dará en las ciudades. Estas ciudades requerirán mejoras en infraestructura como ser en la construcción, agua, higiene, electricidad, residuos, transporte, salud, seguridad pública y conectividad a Internet y celulares.

Alimentos: en las próximas décadas, el sistema global de producción de alimentos se encontrará sujeto a las fuertes presiones ejercidas por los mega-factores: crecimiento de la población, escasez de agua y deforestación. Se predice que los precios globales de los alimentos aumentarán entre 70 y 90% para el 2030. En las regiones de escasez de agua, los productores agropecuarios deberán competir por los insumos con otras industrias que hacen un uso intensivo del agua, tal es el caso de la electricidad y la minería, y con los consumidores. Se requerirá intervención para revertir el aumento de la escasez de alimentos en determinadas áreas (la cantidad de personas con desnutrición crónica aumentó de 842 millones durante la década del 90 a más de 1000 millones en el 2009).

Deterioro del ecosistema: históricamente, el principal riesgo relacionado con el deterioro de la biodiversidad y el ecosistema significaba para las empresas el daño a la imagen. Sin embargo, a medida que los ecosistemas muestran señales de degradación, muchas compañías se dan cuenta de la dependencia existente entre sus operaciones y los servicios provistos por estos ecosistemas. El deterioro de los ecosistemas hace que los recursos naturales sean más escasos, más costosos y reduce la diversidad; aumentando el costo del agua y del daño provocado por la presencia de especies invasoras en diversos sectores como la agricultura, la pesca, los alimentos y bebidas, los productos farmacéuticos y el turismo.

Deforestación: Los bosques son un gran negocio – los productos de la madera aportaron USD100.000 millones al año a la economía global desde el 2003 al 2007, y el valor de los productos derivados de los bosques que no son madera, alimentos en su mayoría, se estimó en aproximadamente USD18.5 mil millones en 2005. Sin embargo, según las proyecciones de la OCDE, las áreas forestadas caerán globalmente un 13% de 2005 a 2030, especialmente en América del Sur y África. La industria maderera y las industrias de producción, tales como  las pasteras y papeleras son vulnerables a una posible legislación que las obligue a ralentizar o revertir la deforestación.

Las compañías también se encontrarán sujetas a las presiones que ejercen los clientes al exigir que los productos sean      sustentables bajo normas de certificación. Las oportunidades de negocios pueden surgir a partir del desarrollo de mecanismos del mercado e incentivos económicos para reducir el índice de deforestación.

El informe fue publicado el día de apertura de la cumbre global de KPMG “Business Perspective on Sustainable Growth: Preparing for Rio+20” ("Perspectiva del negocio sobre la base de un crecimiento sustentable: preparándose para Rio+20") que tuvo lugar en Nueva York. El evento atrajo a más de 400 CEO y líderes de muchas de las empresas más importantes del mundo, junto con responsables de establecer políticas clave. KPMG International fue el anfitrión del evento en colaboración con United Nations Global Compact (UNGC), el World Business Council for Sustainable Development (WBCSD) y el United Nations Environment Programme (UNEP).