Primer conflicto sindical resuelto a través de directrices OCDE
En la Cancillería Argentina se firmó un acuerdo entre la empresa Cargill y la Unión Obrera Molinera Argentina (UOMA) , el sindicato de los trabajadores molineros. La particularidad del convenio es que se trata del primero que se resuelve por aplicación de las Directrices de la OCDE para empresas Multinacionales, que incluyen normas relativas a derechos humanos, transparencia y relaciones laborales. Es la primera vez desde que la Argentina adhirió a las Directrices en 1997 que el mecanismo se pone en funcionamiento.
La Unión Obrera Molinera Argentina (UOMA) y la empresa multinacional Cargill alcanzaron un acuerdo en el conflicto desatado por un reclamo de los trabajadores del gremio por cobro de adicionales, ticket canasta, seguridad e higiene y actividad sindical.
El acuerdo fue logrado en la Cancillería por el titular de la UOMA, Carlos Alberto Barbeito, y el máximo representante de Cargill en Relaciones Institucionales de América Latina, Hugo Krajnc.
Las guías de la OCDE establecen principios voluntarios y estándares elevados para el logro de conductas empresariales responsables en todas las áreas de la ética de los negocios tales como laborales, medio ambientales, corrupción, intereses de los consumidores, ciencia y tecnología, competencia y cuestiones impositivas.
La Argentina, si bien no es miembro pleno de la OCDE, adhirió a los principios en el año 1997. En 2000 el proceso sufrió algunas modificaciones que facilitaron que los sindicatos presenten demandas en los países de origen de las empresas filiales con las que entran en conflicto.
El proceso promueve el diálogo multisectorial entre empresas, sindicatos y Gobierno para la resolución de conflictos.
El Punto Focal de las Directrices en la Argentina, embajador Enrique J. de la Torre afirmó que "es la segunda vez que se aplica el mecanismo en Argentina. La primera vez no hubo movimiento. Ahora, por la voluntad de diálogo de las partes, se ha llegado a buen puerto". La primera demanda presentada fue realizada por el Sindicato Bancario contra la Banca Nazionale del Lavoro, cuando este banco italiano dejó la Argentina sin dar preaviso a sus empleados.