Voluntariado Corporativo: Beneficios para el empleado, la empresa y la comunidad
Disminuir la brecha social, promover el desarrollo, hacer más eficiente la inversión social, mejorar el clima laboral interno, desarrollar habilidades en los trabajadores y ayudar en la retención de talentos, son sólo algunos de los beneficios atribuidos a los programas de voluntariado corporativo en las empresas. Según un estudio internacional de Deloitte realizado durante el 2007, el 75% de los jóvenes profesionales encuestados asegura que su participación en programas de voluntariado corporativo les ayuda a desarrollar habilidades útiles para el trabajo, mientras que un 62% declara preferir laborar en una empresa que tenga este tipo de actividad.
En Chile, en tanto, 9 de cada 10 ejecutivos afirman que esta iniciativa mejora la imagen interna y externa de la compañía en los grupos de interés, según una encuesta realizada a una treintena de empresas que participan en la Mesa de Trabajo de Voluntariado Corporativo de Acción RSE.
Así quedó establecido en el Taller de Aprendizaje "Voluntariado Corporativo: Una mirada global con sabor local" organizado por Acción RSE el pasado jueves 31 de julio, en el cual participaron Pablo Vidal, director de Proyectos de la organización, Mónica de la Mata, responsable proyectos institucionales de la gerencia de Comunicación de Enersis, y Pía Achurra, coordinadora de Proyectos de RSE de El Mercurio.
Vidal estableció que el voluntariado corporativo es "un programa deliberado y planificado que nace del empleador, en concordancia con su estrategia de Responsabilidad Social Empresarial, que busca alentar a los empleados a que se involucren como voluntarios en la comunidad, brindándoles el apoyo necesario para llevarlo a cabo."
En nuestro país se estima que el 9% de los voluntariados se realizan en empresas, y de ese universo, el 41% es Voluntariado Corporativo, mientras que el resto corresponde a iniciativas que no cuentan con el apoyo formal de la empresa. Al respecto Vidal explicó que "si bien es un tema que se ha desarrollado en los últimos años, Chile aún está bajo en relación a otros países como Brasil, donde un 64% de las grandes compañías incorpora el voluntariado como parte de su estrategia".
Cinco pasos
Para implementar el voluntariado al interior de la compañía, es necesario seguir cinco pasos. El primero, explicó Vidal, consiste en crear un comité de trabajo idealmente "multidisciplinario y que reúna a las distintas áreas y jerarquías de la empresa para que actúe como motor de partida del programa."
En segundo lugar, la empresa debe impulsar una reflexión interna sobre su visión, misión y principios, a través de la cual los propios trabajadores evalúen qué es lo que esperan del voluntariado.
En una tercera etapa es importante rescatar los intereses de los empleados para que, como cuarto paso y a partir del cruce de las expectativas de la empresa y el público interno, se defina el mejor aliado estratégico para desarrollar el programa. Por último, se deben tomar las decisiones corporativas en cuanto a la designación de recursos financieros, materiales y humanos, y en cuanto a la estructura de la iniciativa. Esta última incluye definir el departamento que la cobijará, la estrategia de captación de voluntarios, la política de comunicaciones, el monitoreo y la evaluación.
La experiencia
Los casos prácticos presentados por Enersis y El Mercurio coincidieron en su alineamiento con los valores de la empresa, en su implementación metodológica y en su importancia estratégica para la empresa. Además, ambas realizan procesos de mejora de continua para aprovechar de mejor manera los beneficios esperados de la experiencia y superar los obstáculos que se presentan en la práctica.
Los trabajadores de Enersis, a través de Crearte, dan parte de su tiempo a programas pedagógicos en las cuales entregan a los niños de bajos recursos valores que les ayuden a superar su condición social. El programa se inició en el 2007 a modo de piloto y los resultados obtenidos luego de una evaluación a los empleados son: mejora de la relación entre gerencias, mejora de clima laboral y del sentido de pertenencia y "orgullo corporativo", beneficios en relación al trabajo en equipo, motivación y compromiso, e integración de los valores y principios de sostenibilidad de Enersis.
Por su parte, El Mercurio inició la primera etapa de su programa de voluntariado corporativo en marzo de este año, siguiendo la metodología propuesta por Acción RSE. En su caso, la empresa fomenta que sus trabajadores acudan a la Fundación San José a compartir tiempo con los lactantes que están en período de adopción. La evaluación realizada a mediados del programa arrojó que los voluntarios se mostraban muy satisfechos tanto con el diseño del programa como con su trabajo en la fundación, calificando la iniciativa con un 6.8.
(Acción RSE)