Duras críticas de ONG al informe de Derechos Humanos de Nestlé
“El Libro Blanco de los Derechos Humanos” de Nestlé, lanzado en el Foro de la ONU sobre Empresas y Derechos Humanos la semana pasada, “está lleno de agujeros” dicen las organizaciones de la sociedad civil Proyecto Planeta Azul, FIVAS, Food & Water Watch, y la Public Services International. "El análisis es erróneo porque es un examen selectivo de la política corporativa en lugar de un enfoque en la práctica empresarial", sostuvo Maude Barlow, fundadora de Proyecto Planeta Azul y presidenta de Food & Water Watch. Las observaciones de las ONG se focalizaron en el aspecto del acceso al agua.
El Programa "Creación de Valor Compartido " de Nestlé se promociona en el informe como una estrategia para hacer frente a las necesidades de las comunidades impactadas , sin embargo, como señala Barlow en su libro recientemente publicado Blue Future, “hay discrepancias significativas entre los llamados valores de Nestlé y su práctica real”.
"Uno de los valores clave del "valor compartido" es la necesidad de la conservación del agua en el mundo", sigue Barlow. "Pero está claro que no ha sido transmitido a Nestlé Waters Canadá, que apeló recientemente una decisión del Ministerio de Medio Ambiente de Ontario para imponer reducciones obligatorias en tomas de agua en tiempos de sequía severa".
Las ONG consideran que la participación del Instituto Danés de Derechos Humanos está muy lejos de ser un análisis independiente sobre los impactos en los derechos humanos de las actividades de Nestlé. Los parámetros para la evaluación fueron establecidos por Nestlé y constituyen un conjunto limitado de criterios que pasan por alto áreas clave como el derecho humano al agua.
Además, la mayor parte de la evaluación se llevó a cabo por el propio personal de la empresa y los datos finales fueron examinados por la sede de Nestlé y por ejecutivos en los países en los que se evaluaron las operaciones.
“Las evaluaciones de impacto de los derechos humanos son una ciencia emergente. No se sabe muy bien lo que son o deberían ser. Al compartir las lecciones que hemos aprendido esperamos mejorar esta práctica. Lo que hemos hecho no es en absoluto perfecto y habrá cosas que podemos haber pasado por alto. Los derechos humanos son un blanco móvil y la debida diligencia corporativa en derechos humanos debe evolucionar junto con ellos”, advirtió Allan Lerberg Jorgensen, Director del Human Rights and Business, del Danish Institute for Human Rights, en el prólogo al documento de Nestlé.
"Las fallas de Nestlé sobre el derecho humano al agua no son sorprendentes teniendo en cuenta las recientes declaraciones de su presidente, Peter Brabeck, desafiando el derecho humano al agua", expresó Wenonah Hauter , Director Ejecutivo de Food & Water Watch. La compañía declaró famoso en el Foro Mundial del Agua 2000 en los Países Bajos que el agua debe ser definida como una necesidad, no como un derecho humano.
En rigor, Brabeck aclaró esta posición señalando que no cree justo que algunas personas en el mundo todavía no tengan acceso a un suministro limpio y seguro, mientras que otros pueden usar cantidades excesivas para fines no esenciales, sin tener que soportar un costo.
En 2012 , entre las numerosas quejas contra Nestlé en esta área, la película “Bottled Life” documentó el conflicto entre Nestlé y la comunidad de Bhati Dilwan , una aldea en Pakistán, donde los líderes locales y miembros de la comunidad han acusado a Nestlé por el drenaje de las aguas subterráneas para producir su “Pure Life bottled”.
Barlow también señala que si bien el informe elogia a Nestlé para proporcionar capacitación en derechos humanos para el personal de seguridad en Colombia, no hace ninguna mención al hecho de que en 2009 una serie de organizaciones sindicales y de derechos humanos lanzó una campaña para exigir que Nestlé sea expulsada del Pacto Mundial de la ONU por la represión sindical y el trabajo infantil en Colombia.
Las organizaciones también denuncian el creciente papel de Nestlé en la formación de políticas públicas a través de su participación en los órganos multilaterales, incluido el Grupo 2030 de Recursos Hídricos, el Pacto Mundial de las Naciones Unidas y la Asociación Mundial para el Agua.
“Nestlé ha utilizado su posición privilegiada para promover un mayor acceso privado a los recursos hídricos y a los servicios públicos de agua y saneamiento a pesar de la creciente oposición al control corporativo del agua en todo el mundo", sostiene David Boys de la Federación Sindical Internacional de Servicios Públicos.
Nestlé es actualmente el principal proveedor de agua embotellada del mundo, incluyendo marcas como Perrier y San Pellegrino.
"Dado el enfoque selectivo, el alcance limitado y flagrantes omisiones , el informe no puede ser visto como algo más que la última maniobra de relaciones públicas de la compañía", acusó Jorgen Magdahl de la ONG noruega FIVAS .