¿Qué expectativas tiene Sodimac para la COP25?

“Tenemos las mismas expectativas que tienen todos, el mundo en general tienen muchas expectativas sobre lo que está pasando. No sólo porque se haga la COP25 en Chile, sino porque a nivel global tenemos más conciencia de los impactos del cambio climático.
El incremento de las inundaciones, las sequías, es decir, los efectos extremos del clima se perciben y ya no se pueden negar. La ola de calor de Europa, los huracanes en los Estados Unidos, pero también en Chile está sucediendo, trombas marinas en lugares que nunca los hubo. Todos los ciudadanos están preocupados por este tema. El lema de la COP llama a tomar acción. Y este mensaje es clave para las empresas chilenas. Ya pasamos el tiempo de las discusiones, del análisis, la evidencia hoy es incontrarrestable. Necesitamos pasar a la acción y la organización en Chile de la COP puede permitir impulsar este tema en las empresas chilenas.

Asimismo, me gustaría destacar que la organización de la COP25 en Chile es un hito en sí mismo, porque lo organiza un gobierno de centroderecha, no un gobierno ecologista sino más bien un gobierno moderado en estos temas. Pero existe un reconocimiento de que el mundo necesita respuestas prácticas y concretas al Cambio Climático y que América Latina tiene mucho para compartir, por eso es bueno que no se haya perdido la oportunidad de organizarlo en nuestra región.

Ahora, debo mencionar que las condiciones de discusión en esta COP son difíciles aún cuando haya signos positivos, como por ejemplo el liderazgo de China en energías renovables en los últimos años. Por su parte, Europa está atravesando un año político complejo. Sin embargo el continente está marcado por la presión ciudadana y las políticas de Estado se mantienen y sus compromisos crecen con los años. En los Estados Unidos, todo avanza a pesar de Trump ya que tienen una ciudadanía, una red de Estados y ciudades que están mostrando liderazgo. Creo que la COP25 va a traer novedades, las expectativas son altas, y uno de los temas claves será la adaptación, es decir cómo mejorar la infraestructura para adaptarse a los fenómenos extremos del clima”.

¿Cuál es el rol que puede cumplir el sector privado de Chile y América Latina de cara a la COP25?

“Las empresas deben repensar la forma de hacer negocios, deben medir sus impactos, lo que se conoce como la huella ambiental. Además deben reconfigurar sus operaciones para reducir las emisiones. Estas son las expectativas sobre el rol empresario y el mensaje de ambición se hace escuchar. Necesitamos empresas que midan su huella con protocolos internacionales, no necesitan inventar la rueda sino alinearse. Sodimac mide su huella por lo menos hace 7 u 8 años y además gestionamos la reducción proactivamente. Por ejemplo, somos el primer retail que ha logrado que su despacho a domicilio sea cero emisiones, y creemos que para 2030 llegaremos a ser carbono neutral, esa es nuestra meta. Vamos a ser un contribuyente concreto a que la meta de neutralidad de carbono del gobierno chileno se cumpla para 2040, ese es nuestro aporte. El compromiso que hacemos de cara a la COP25 es empujar estos temas y que más empresas se sumen.

Como país estamos haciendo lo correcto, no importa el signo político del gobierno, a nivel país creemos que estos temas son estratégicos. Por eso cuando Brasil renunció a organizar la conferencia, fue correcto que el gobierno se postule. Creemos que desde el sur del mundo, desde los países en vías de desarrollo tenemos una voz y podemos contribuir a pasar a la acción a través de dar señales de liderazgo como la decisión de organizar este evento.

Chile avanza este año con la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor, ¿Cómo evalúa Sodimac el nuevo reglamento de Envases y Embalajes que se está discutiendo?

“En Sodimac vemos de manera positiva la ley REP. Creemos que las empresas no pueden seguir externalizando sus impactos ambientales negativos como si no fueran parte de su operación. Hubiésemos querido que muchas más empresas incorporaran voluntariamente las externalidades medioambientales negativas en sus propios procesos de producción pero esto es difícil y lento. Por lo que creemos que una ley de este tipo entrará a emparejar la cancha entre las empresas que ya gestionábamos este tema y las que no.

Desde 2006 Sodimac tiene una política de sostenibilidad alineada a su estrategia de negocios que contempla los impactos sociales y ambientales de la compañía. Por lo que nosotros ya teníamos internalizado estos temas en nuestras operaciones. Vemos con preocupación que otras empresas no lo hagan de buenas a primeras, de manera voluntaria y como medida de autorregulación. Por lo tanto, creemos que la ley es positiva y viene a contribuir a solucionar un problema muy sustancial que es el problema ambiental de los residuos.
Nosotros apoyamos desde un inicio la ley, dentro de las instancias gremiales de las que participamos. Lo que más destacamos es que haya sido aprobada por unanimidad por todos los sectores políticos, porque deriva de un convencimiento en Chile de que los temas medioambientales no pueden esperar. Y las empresas que estén alineadas a ese convencimiento, a ese sentir de la ciudadanía, van a lograr captar y responder a esas demandas.

Además destacamos que los funcionarios del Ministerio del Medio Ambiente hayan tenido una actitud muy abierta en general, tanto en este gobierno como en el anterior. No es una norma que se haya construido en una oficina a puertas cerradas sin participación. Esto creemos que es positivo y hay que seguir fomentándolo”.

¿Cuáles son los desafíos que debe enfrentar Chile en Economía Circular?

“La economía circular es uno de los conceptos más antiguos a pesar de su novedad, porque se basa en la cosmovisión pre moderna de los pueblos originarios donde nada se perdía sino se regeneraba. Es común leer esta cosmovisión en todas las culturas ancestrales pero en la industrialización se eliminó esta lógica y primó la cultura del desecho. Ahora la fuerza del Cambio Climático nos ha mostrado que esto es insostenible.
Uno de los desafíos para Chile será conformar el primer sistema de gestión colectivo de reciclaje pero creo que el desafío más importante será trabajar en ecodiseño así como en la materialidad de los envases, es decir lograr que sean reciclables desde su diseño. Estos temas son aún más importantes que garantizar la posterior separación y reciclaje de los residuos. Esto está contemplado en la normativa y aquellas empresas que trabajen en estos temas van a recibir incentivos legales. Esto es un campo prioritario para los próximos años en Sodimac.

Nos hace sentido que este sea el camino a transitar ya que somos los primeros en tener puntos limpios en nuestras tiendas que nutren de material reciclado a nuevos productos que vendemos en nuestras tiendas. Esto es economía circular de verdad, no solo teoría.

Otro gran desafío se presenta por el comercio online. Hoy tenemos una gran tienda online que ya no se restringe por los límites de nuestras tiendas físicas, pero si no logramos incorporar estos criterios de sustentabilidad entonces la web es convertirá en un acelerador de impactos negativos. La digitalización de los procesos económicos puede acelerar los impactos negativos en las cuestiones ambientales. La lógica lineal de producción puede ser impulsada por las potencialidades del Internet. Este es el desafío para los próximos años”.

Para Sodimac el trabajo con la cadena de valor es estratégico ya que como un Retail no tiene producción propia, ¿cómo es el trabajo con los proveedores en sustentabilidad?

“Sodimac cuenta con un centro de innovación con proveedores (CIP) para trabajar en los desafíos de incorporar la economía circular a sus procesos. Para ello ponemos a disposición expertos de Sodimac para trabajar en innovación. Es decir, el centro ofrece asesoramiento para alinear sus procesos a estos criterios de sustentabilidad.

En el fondo el proveedor se da cuenta de que es un buen negocio seguir este camino ya que en el proceso de compras se los valora por encima de los proveedores tradicionales. Hasta hace muy poco nuestros proveedores eran evaluados como en todas las empresas de Retail, por criterios económicos como precio, calidad, tiempo de entrega. Pero crecientemente hemos incorporado criterios ambientales y sociales. Por ejemplo, se los califica positivamente si tienen una autoevaluación de cuestiones sociales y ambientales, o si el proveedor incorpora criterios de economía circular. Nuestra matriz de evaluación ya incorpora estos criterios. Entonces, ante proveedores con misma calidad y precio, se valora el que acredita estos temas. Esto es un incentivo directo.

No son temas fáciles, hay que medirlos, reportarlos, pero tenemos vocación de hacer una forma de hacer los negocios de manera responsable. Creemos que esta forma es la forma de atraer talentos, de retenerlos, de ser atractivos para los clientes, el retorno es mucho. Son un buen negocio".