La paridad solamente ha avanzado 4,1 puntos porcentuales desde la primera edición del informe, publicada en 2006, y el ritmo general de cambio se ha ralentizado de forma considerable.

Para cerrar la brecha de género total harán falta 131 años. Al ritmo actual, se tardarán 169 años en alcanzar la paridad económica y 162 en lograr la paridad política.

“Aunque se han observado signos alentadores de recuperación hasta los niveles anteriores a la pandemia, las mujeres siguen siendo las más afectadas por la actual crisis del coste de la vida y las perturbaciones del mercado laboral”, declaró Saadia Zahidi, directora general del Foro Económico Mundial. .

Dentro de los aspectos destacados de 2023 a escala global y regional, Islandia es el país con mayor igualdad de género del mundo por decimocuarto año consecutivo y el único que ha cerrado más del 90 % de su brecha de género.

Aunque ningún país ha alcanzado aún la plena paridad entre hombres y mujeres, los nueve primeros de la clasificación han cerrado al menos el 80 % de su brecha. Así, los 10 primeros países son: Islandia, Noruega, Finlandia, Nueva Zelanda, Suecia, Alemania, Nicaragua, Namibia, Lituania y Bélgica. 

Europa es la región con mayor paridad de género, con un 76,3 %. Un tercio de los países de la región se sitúan entre los 20 primeros y más de la mitad (56 %) han alcanzado al menos una paridad del 75 %. Sin embargo, los progresos son desiguales: 10 países, encabezados por Estonia, Noruega y Eslovenia, han mejorado al menos un punto porcentual, mientras que otros 10 países –entre ellos Austria, Francia y Bulgaria– han registrado descensos de al menos un punto porcentual.

Por su parte, América del Norte ocupa el segundo lugar; esta región ha conseguido cerrar el 75 % de su brecha, lo que representa un descenso de 1,9 puntos porcentuales desde la edición anterior. 

La región de América Latina y el Caribe ha cerrado el 74,3% de su brecha de género total, registrando un aumento de 1,7 puntos porcentuales en la paridad de género global desde el año pasado. Con un progreso incremental en la paridad de género desde 2017, la región exhibe ahora el tercer nivel de paridad más elevado. Nicaragua (81 %), Costa Rica (79,3 %) y Jamaica (77,9 %) registran las puntuaciones de paridad más altas de esta región.

Oriente Medio y Norte de África sigue siendo la región más alejada de la paridad, ya que solo ha cerrado un 62,6 % de la brecha de género. Esto representa un descenso del 0,9 % en la paridad desde la edición anterior. 

Pese a que las mujeres se han incorporado a la población activa a un ritmo superior al de los hombres en todo el mundo, lo que ha dado lugar a una pequeña recuperación (63 %-64 %) de la paridad de género en la tasa de participación en la población activa desde la edición de 2022, las brechas en el mercado laboral siguen siendo amplias. 

Además, las mujeres siguen enfrentándose a tasas de desempleo más elevadas que los hombres; a escala mundial, dicha tasa es del 4,5 % para las mujeres y del 4,3 % en el caso de los hombres.

Por otro lado, los datos mundiales proporcionados por LinkedIn, que abarcan 163 países, muestran que, a pesar de que las mujeres representan el 41,9 % de la población activa en 2023, la proporción de mujeres en puestos de alta dirección (directoras, vicepresidentas o altas ejecutivas) es casi 10 puntos porcentuales inferior, con un 32,2 %. Aunque la proporción de mujeres contratadas para puestos directivos aumentó de forma constante en torno a un 1 % anual en todo el mundo a lo largo de los últimos ocho años, esta tendencia se invirtió en 2023, retrocediendo a los niveles de 2021.

En los mercados laborales del futuro, los empleos en los campos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (CTIM) suelen estar bien remunerados y se espera que crezcan en importancia y alcance. Sin embargo, los datos de LinkedIn sugieren que las mujeres siguen estando significativamente infrarrepresentadas en la población empleada en dichos ámbitos, ya que solamente representan un 29,2 % del total. En el terreno de la inteligencia artificial (IA), la disponibilidad de talento se ha disparado, ya que entre 2016 y 2022 se multiplicó por seis; sin embargo, el porcentaje de mujeres que trabajan en IA hoy en día es de aproximadamente un 30 %, solo 4 puntos porcentuales mayor que en 2016.

En el aprendizaje en línea, la persistente brecha digital es uno de los factores que conducen a la desigualdad de oportunidades entre hombres y mujeres. Los datos de Coursera sugieren que, aparte de los cursos de enseñanza y mentorización, existe disparidad en la matriculación en todas las categorías de competencias. La matriculación en competencias tecnológicas como la alfabetización tecnológica (43,7 %) y la IA y los macrodatos (33,7 %) se sitúan muy por debajo de la paridad del 50 % y los avances han sido lentos. En todas las categorías de competencias, las brechas de género tienden a aumentar a medida que crecen los niveles de competencia. Sin embargo, los datos sugieren que, cuando las mujeres se matriculan, tienden a alcanzar la mayoría de los niveles de competencia en las categorías estudiadas en menos tiempo que los hombres.